Un joven de 22 años, exalumno del colegio de los Maristas de Sants-Les Corts, ha declarado ante los Mossos d’Esquadra que Joaquim Benítez le dio 10 euros tras abusar de él en el despacho que este tenía junto a la piscina. El joven, deportista, le comentó un día que se había hecho daño en un entrenamiento de natación. ‘Beni’ le propuso darle un masaje en la zona lesionada de la pierna y el alumno, que entonces tenía 14 años, aceptó. Así lo encerró en su despacho.

Tumbado en calzoncillos sobre su camilla, comenzó con el masaje prometido pero terminó practicándole una felación. El alumno trató de subirse los calzoncillos para detenerlo pero Benítez se lo impidió, valiéndose de una “corpulencia” superior y de la intimidación que su rol de profesor le otorgaba. Cuando terminó, el pederasta le dio el billete de 10 euros y, antes de que abandonara el despacho, le pidió que no dijera “nada a nadie”. Según reconoce la víctima, transcurridos 8 años, sigue teniendo dificultades para mostrarse cercano en el trato con otros hombres. Como a otras víctimas, también a él le cuesta abrazar a su padre.