La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, se ha reafirmado este lunes en el argumento de que sus ediles Carlos Sánchez Mato y Celia Mayer no están imputados en el 'caso Open de Tenis', y se ha remitido a sus palabras de junio cuando dijo que ambos dimitirían si eran imputados.

Carmena se ha referido de este modo a la situación de sus dos ediles, que declaran este lunes como investigados en el juzgado número 21 de Madrid por presuntos delitos societario, de malversación de fondos y prevaricación por encargar a dedo dos informes de 50.000 euros para denunciar irregularidades en el 'Open de Tenis'.

"Si fuera así, si hubiera una imputación formal por un delito de corrupción, tengan por seguro que mi postura sería clara y determinante: naturalmente que sí, que en ese caso habría que dimitir", dijo en su día ante el Pleno la alcaldesa, unas palabras que no ha reiterado pero a las que sí se ha referido.

La alcaldesa ha lamentado "muchísimo" el desconocimiento jurídico "tan importante" de los concejales de la oposición que repiten que Sánchez Mato y Mayer están imputados cuando -ha insistido- no lo están. "No hay imputación y lo sabéis perfectamente porque en conversaciones privadas lo reconocéis", ha dicho.

Citación judicial

Tres meses después de conocerse que tendrían que acudir en calidad de "querellados" -figura equivalente al investigado- tras la querella presentada por el PP, los dos ediles madrileños se enfrentan este lunes a su citación judicial junto a la exconsejera delegada de Madrid Destino, Ana Varela, en los Juzgados de Plaza de Castilla.

El juez admitió a trámite en junio la querella presentada por el grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Madrid contra los dos ediles por encargar "a dedo" dos informes externos de 50.000 euros para denunciar el convenio de gestión del torneo de tenis cuando formaban parte del consejo de administración de Madrid Destino.

Sánchez Mato y Mayer estiman que su imputación es consecuencia directa de alertar ante la Fiscalía de las posibles irregularidades en el contrato suscrito entre el exalcalde Alberto Ruiz-Gallardón (PP) y la empresa Madrid Trophy Promotion para la celebración del torneo hasta 2021, un contrato renovado por el Gobierno municipal del que ambos ediles forman parte.