El presidente del PP, Pablo Casado, ha puesto encima de la mesa una serie de propuesta para "salvaguardar el edificio de la Constitución" ante el independentismo en Catalunya. Entre sus medidas se encuentra una Ley de Lenguas, una Ley de Símbolos o el refuerzo de las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno para que ejerzan algunas de las competencias transferidas a las comunidades autónomas en el caso de que los Gobiernos regionales hayan hecho alguna dejación de funciones.

En un desayuno informativo celebrado por Europa Press, el líder popular ha puesto el foco en la necesidad de "reforzar la nación" e impedir que "haya distinta prestación de servicio dependiendo de en qué autonomía se está". En este sentido, ha apostado por una Ley de Lenguas que articule el castellano como lengua vehicular. Según ha explicado, esto conllevaría que no puedas "ser multado si no es en castellano", "que la señalización urbana se tenga que hacer en castellano" o que las lenguas cooficiales se consideren un "mérito" y no un "requisito" para acceder a un puesto de trabajo.

Otra de sus propuestas es una Ley de Símbolos que "penalice los ultrajes a la Corona, a la bandera, y los pitidos al himno" y que, además, no permita que se politice el espacio público con símbolos partidistas. Más contundente ha sido al afirmar que no se debería permitir a los "funcionarios pasar consulta o dar clase con símbolos políticos".