El nuevo Pablo Casado sigue con sus formas suaves. Ha reunido a la cúpula del PP y a los barones territoriales para darles argumentario ante la nueva campaña de las elecciones generales del 10 de noviembre y les ha hablado de «prudencia», «generosidad» y «unidad». Sobre todo, unidad en el centro-derecha. Según él, la división entre el PP, Ciudadados y Vox ha sido «uno de los errores más graves de la historia del liberalismo y del conservadurismo español» y pide aliarse para poder «gobernar». Casado avisa Albert Rivera de que no tiene opciones de ocupar su puesto. «No hay posibilidad alguna de sustituir al PP como cerebro, corazón y pulmón del centroderecha español», dijo ayer en un discurso ante el comité ejecutivo nacional.

Según el presidente de los populares, si Rivera quiere ser un verdadero patriota no puede seguir descartando la coalición electoral España Suma que le propone. Queda poco tiempo para que esa alianza pueda hacerse realidad, en todo caso. La ley marca que podrían registrarla hasta el 29 de septiembre y, según fuentes del PP, no hay ninguna reunión formal prevista entre ambos partidos. «Yo creo que no se puede invocar patriotismo alguno, ni principio político digno alguno capaz de justificar un comportamiento que produce un resultado tan dañino para los propósitos básicos que compartimos y para el conjunto del país», afirmó Casado.

Dirigentes de Ciudadanos han alegado estas semanas que lo que se quiere es esconder las siglas del PP. Casado dijo ayer: «Tenemos que mirarnos menos el ombligo, ser menos partido y ser más una plataforma política que está mas cerca de los españoles cuando peor lo pasan».

GARCÍA EGEA DIRIGIRÁ LA CAMPAÑA / En el encuentro, se anunció que el secretario general, Teodoro García Egea, será el encargado de dirigir la campaña electoral. Con esta decisión, Casado reafirma a García Egea, tocado internamente por su estilo a la hora de elaborar las listas para las municipales y autonómicas de los comicios de abril y mayo. Dirigentes territoriales se quejaron de manera profusa sobre el poco diálogo y las imposiciones que hubo para colocar en puestos de salida a políticos que habían apoyado a Casado en las primarias y apartar a personas con largo recorrido. Para las generales de abril, el encargado de dirigir la campaña fue el vicesecretario de Organización, Javier Maroto. Ahora, según fuentes de la dirección, en el comité electoral habrá un representante de cada territorio, en un intento de facilitar la comunicación y tratar de superar esa fisura que se abrió en primavera.

Los barones críticos con Casado, los que le pidieron tras la debacle de abril que volviera al centro, aplaudieron ayer su nuevo tono a la salida de la reunión. Tanto el presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, como el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, mostraron su satisfacción por este nuevo Casado y cerraron filas.