El presidente del PP, Pablo Casado, considera que una repetición de las elecciones generales sería «una tomadura de pelo», pero que su partido está trabajando para atender cualquier posibilidad. «El PP no quiere unas nuevas elecciones, pero estamos preparados para volver a liderar este país», dijo ayer, sobre la posibilidad de que Pedro Sánchez no logre sacar adelante su investidura antes del 23 de septiembre.

Este es el mensaje de fondo que Casado dejó caer ayer a su partido en Ávila, en un acto con militantes con el que quiso dar el pistoletazo de salida al complejo curso político que se inicia este mes. Casado volvió a descartar el facilitar la investidura del líder socialista y le pidió que abandone la «amenaza bastante hipócrita» de seguir reclamando la abstención del PP en el Congreso para no tener que pactar con los independentistas. Casado insistió en que «no quiere elecciones generales» por responsabilidad, a pesar de que «hay quien dice» que le «puede venir bien» al PP o que «reforzarían» el papel de los populares en el bloque de centro-derecha.

Pero, ante la eventualidad de unos nuevos comicios generales, volvió a lanzar su propuesta de formar una alianza de partidos con Ciudadanos y Vox en una plataforma electoral.

Desde su punto de vista, la plataforma España Suma, en caso de ganar, garantizaría a los electores la formación de un Gobierno y no tener que volver a repetir comicios.

«Ofrecemos estabilidad y desbloqueo. Si Sánchez nos quiere llevar a elecciones, que todo el mundo sepa que el PP desbloqueará la situación», dijo, en alusión a esa hipotética alianza con Cs y con Vox, que por el momento descartan. «Nuestra responsabilidad será unir en torno al PP a todos aquellos que quieren unidad para España», añadió, en defensa de una alianza que se plantea «para hilvanar un proyecto común», y no «para abrir una trinchera», como le reprochó ayer mismo Pedro Sánchez en una entrevista publicada por el diario El País.

Tras afirmar que al PP no se le va a «encontrar» en el juego de ver «quién tiene la culpa» de la actual situación política, que calificó de «tomadura de pelo e irresponsabilidad», Pablo Casado se mostró «convencido» de que los votantes de centro y derecha que han visto que la «fragmentación» del voto «facilitó» un gobierno del PSOE, «no entenderían» que esta situación se repitiera. En este contexto, refiriéndose a la plataforma planteada por los populares en torno a España Suma, a semejanza de Navarra Suma, Casado afirmó que «allá donde el PP ha sumado, España ha ganado», a diferencia de lo que a su juicio ha ocurrido con el PSOE, que «donde ha sumado, España ha perdido».

«Yo no propongo esto por rédito personal ni partidista, soy una persona de consensos y acuerdos», argumentó.

Durante su intervención ante los militantes -entre los que se encontraba la práctica totalidad de la junta directiva, el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso-, Casado se refirió al empeoramiento de la situación económica, de la seguridad ciudadana y de la tensión territorial por Cataluña en los tres últimos meses. En relación a Cataluña, la situación ha «empeorado», según Casado, porque el presidente del Gobierno en funciones no ha rechazado abiertamente pactar con los independentistas.

Además, está por delante la previsible escalada de la tensión vinculada a la próxima sentencia del Tribunal Supremo por el juicio del procés. «Torra ha dicho a sus cachorros que hay que apretar, sea cual sea la sentencia», advirtió. «No decimos que vayamos a decir no a Sánchez si tiene que aplicar el artículo 155 (de la Constitución)» en Cataluña, admitió Casado. «No estamos en el no es no porque nos caiga mal, sino porque su proyecto político está en contra de los intereses de futuro de nuestros hijos», dijo. En ese punto, criticó la disposición a dialogar con «quienes quieren romper la igualdad entre españoles».

Junto al asunto territorial, las otras cuestiones que -según Casado- han empeorado en los tres últimos meses, con un Gobierno en funciones, son la seguridad ciudadana y la economía. Casado criticó también el efecto llamada que, a su juicio, alienta la política de inmigración del Gobierno en funciones y la pasividad del Ejecutivo ante los homenajes a etarras o las convocatorias contra la Guardia Civil, como la de Alsasua (Navarra) de este fin de semana.

CONVENCIÓN ECONÓMICA / Para hacer frente a la creciente incertidumbre económica mundial, el PP celebrará en las próximas semanas una convención en la que tratará de afinar la respuesta política del PP. «A la gente le da miedo que vuelva a venir otra crisis», según el líder del PP, que cargó también contra la gestión económica socialista y los anuncios de subidas de impuestos.