El presidente del PP, Pablo Casado, reúne este martes por primera vez a su nuevo Comité de Dirección para analizar el panorama político al inicio del curso y para lanzar al partido ante cualquier escenario, o el de repetición de elecciones en noviembre o el de un gobierno de izquierda pactado entre PSOE y Unidas Podemos.

La reunión de este martes coincidirá con la presentación de las 300 medidas que el PSOE plantea para desbloquear la investidura de Pedro Sánchez. Los 'populares' no se dan por aludidos, se niegan a abstenerse para facilitar otro gobierno de Sánchez e instan al presidente a entenderse con sus aliados "naturales", los que ya tiene en las autonomías, empezando por Podemos. Aunque todo apunta a que no habrá acuerdo del PSOE con Unidas Podemos, admiten en el PP, tampoco se puede descartar que se desbloquee la situación a última hora. Si finalmente hay elecciones los 'populares' aseguran que están "preparados", pero añaden que también lo están para hacer una oposición fuerte.

Casado debatirá sobre todas estas cuestiones con su nuevo equipo de dirección, renovado a finales de julio y que se reúne por primera vez mañana. Está formado entre otros por la nueva portavoz del Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, que llegó al cargo entre las dudas de parte del grupo parlamentario pero que en su estreno el pasado jueves, con un debate en Pleno sobre el 'Open Arms', convenció a la mayoría de sus compañeros de filas.

NO DE CS A 'ESPAÑA SUMA'

Los 'populares' llegan a este inicio de curso con la incertidumbre de saber si Casado afrontará sus segundas elecciones generales cuando sólo lleva un año al frente del partido. Por si esos comicios se convocan, el PP ha registrado la marca España Suma a imitación de la de Navarra Suma, creada en esta comunidad junto a UPN y Ciudadanos.

El partido de Albert Rivera se ha cerrado en banda a diluir su marca en otro proyecto junto al PP. Este lunes ha sido tajante en una entrevista en Onda Cero: "España suma, pero la corrupción resta". Los 'populares' insisten en que serviría para traducir en más escaños en el Congreso los votos del centro derecha, que sólo sumando fuerzas en una única lista se puede rentabilizar ese apoyo y dudan de que, por separado, si hay elecciones en noviembre, logren una suma alternativa a la de la izquierda.

PENDIENTES DE LOS BARONES

Donde es seguro que habrá elecciones el año que viene es en Galicia y en el País Vasco, donde toca celebrar comicios autonómicos. En la primera comunidad se desconoce si Alberto Núñez Feijóo, el líder territorial menos afín a Casado, será o no otra vez candidato de su partido; lo que han dejado claro los 'populares' gallegos es que no quieren formar un Galicia Suma en sus autonómicas.

También afrontan comicios los vascos y tampoco en esta comunidad el PP que lidera Alfonso Alonso es partidario de fundir sus siglas en ese nuevo proyecto. El PP vasco, ha advertido el dirigente 'popular', no se presentará a las elecciones "con nadie que no vaya a aceptar la defensa de la foralidad o que ataque el Concierto vasco".