Un centenar de personas se sumó ayer a la petición de ‘Libertad para los Jordi’, Jordi Cuixart, presidente de Òmnium Cultural; y Jordi Sànchez, de la Autoritat Nacional Catalana (ANC), en una concentración silenciosa en la plaza María Agustina, frente a la Subdelegación del Gobierno en Castellón. Fue menos multitudinaria que la de Barcelona, que congregó a miles de personas, y que la de València, pero, organizada por Acció Cultural del País Valencià, reclamó la puesta en libertad de los dos presos, motores del proceso independentista catalán, tan solo 24 horas después de su ingreso en prisión tras imputarles un delito de sedición. La concentración, silenciosa, estuvo encabezada por una pancarta que decía ‘Ara, democràcia. Llibertat als presos polítics’.