El pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha decidido responder a la presión que desde el Gobierno y colectivos de izquierda le instaban a paralizar sus nombramientos hasta ser renovado, con la elección por una amplísima mayoría de tres magistrados para la Sala Segunda del Tribunal Supremo, la que se ocupa de juzgar a los aforados. Los tres han recibido 19 votos a favor y ninguno en contra, aunque dos vocales han votado en blanco.

Se trata de un magistrado que se presume de tendencia conservadora, Ángel Hurtado, porque participó en la sentencia de la 'Gürtel' que provocó la moción de censura que acabó con el Gobierno de Mariano Rajoy y renunció a redactar la parte relativa a la caja B del PP, que cedió a su compañero José Ricardo de Prada. A los otros dos, en cambio, se les atribuya una sensibilidad progresista. Son Javier Hernández y Leopoldo Puente. En cualquier caso, los tres han contado con el respaldo de prácticamente todos los vocales con independencia de qué partido les propusiera para el órgano de gobierno de los jueces en su día.

Precisamente uno de los argumentos para pedir que el Consejo realizara los nombramientos, pese a que es lo que prevé la ley, es que su presidente, Carlos Lesmes, aprovecharía para designar a magistrados consercadores a la Sala de lo Penal del alto tribunal. Justo este CGPJ ha sido el único que ha paralizado los nombramientos en enero y el pasado mes de julio para tratar de forzar una renovación que corresponde a las Cortes, a las que Lesmes se dirigió hasta en cuatro ocasiones, además, de verbalizarlo durante el último acto de apertura del año judicial.

También amplio refrendo

En el resto de nombramientos pendientes el pleno ha reproducido el mismo consenso. El Consejo ha elegido a César Tolosa como presidente de la Sala Tercera o de lo Contencioso del Tribunal Supremo, con un apoyo de 18 votos. La otra magistrada que optaba al puesto, Pilar Teso, solo ha obtenido el apoyo de un vocal y otros dos han vuelto a votar en blanco.