Un fallo plagado de «prejuicios, juicios de valor, elucubraciones, sospechas y presunciones contra reo, basadas en supuestas inferencias que carecen del más mínimo apoyo en unos hechos que quedaran acreditados en el juicio oral». Este es el argumento esgrimido por el expresidente de la Junta de Andalucía Manuel Chaves para recurrir en casación ante el Tribunal Supremo (TS) su condena a nueve años de inhabilitación por prevaricación en el caso de los eres fraudulentos.

Chaves, presidente del Gobierno andaluz 19 años y apartado del PSOE tras haber sido uno de sus barones territoriales más poderosos, fue condenado con otros 18 exaltos cargos, por la ilegalidad del sistema empleado para dar ayudas públicas al empleo entre el 2001 y el 2009. Según la sentencia dictada el pasado noviembre, todos ellos fueron «plenamente conscientes» de la «palmaria ilegalidad».