Más de 100 organizaciones feministas han convocado una gran concentración frente al Parlamento andaluz el 15 de enero, cuando podría celebrarse la investidura de Juan Manuel Moreno, para mostrar su rechazo a las «falacias» de Vox y exigir a PP y Cs que «no negocien los derechos de las mujeres».

«Con citas electorales la próxima primavera, se impone la necesidad de que, especialmente las mujeres, por lo mucho que nos jugamos, ejerzamos nuestra responsabilidad democrática y dejemos claro que nuestros derechos son intocables y que no hay pacto posible con quienes defienden en las instituciones las pretensiones de los violentos. No vamos a callar». Así termina el manifiesto Ni un paso atrás que se difundió ayer en una multitudinaria rueda de prensa en Madrid y otras 20 ciudades. Fue la acción inicial o la «casilla de partida» a un conjunto de movilizaciones que estos colectivos feministas llevarán a cabo, y que comenzarán con la concentración frente al Parlamento andaluz.

Esa movilización se reeditará por la tarde del mismo día en todas las provincias. A partir de ahí, los colectivos feministas avisan de que llevarán a cabo una «campaña constante y permanente» con la vista puesta en calentar motores de cara al 8-M, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, jornada en la que no dudan que los planteamientos «machistas» de Vox serán protagonistas.

Asimismo, asociaciones como la Federación de Mujeres Progresistas o Mujeres Juristas Themis estudiarán solicitar la ilegalización del partido ultra y querellarse contra sus líderes por injurias y calumnias. Sin embargo, admitió la presidenta de Themis, María Ángeles Jaime de Pablo, esas vías son «largas y costosas» y no producen resultados inmediatos. La ilegalización se fundamentaría en que Vox vulnera el principio de igualdad recogido en la Constitución, aunque tendría pocos visos de salir adelante porque, hasta ahora, solo se ha consumado la prohibición de Batasuna con el argumento de que justificaba la violencia de ETA.

Antes de que se firmara el pacto de gobierno en Andalucía, esos colectivos hicieron un llamamiento a la sociedad a que secunde sus movilizaciones y pidieron a PP y Cs que no accedieran a las «pretensiones e imposiciones» de Vox, que reclama derogar las leyes andaluzas contra la violencia machista, de igualdad y de apoyo al colectivo LGTBI. El manifiesto avisa de que un partido que no está en el Congreso, como Vox, no puede derogar la ley estatal contra la violencia machista y avisa a los ultras de que «negar la violencia de género» y sus cifras alarmantes es como negar el Holocausto judío.