El PSOE, En Comú Podem, independentistas, nacionalistas pero también Ciudadanos coincidieron este martes en el Congreso en criticar al PP por practicar el electoralismo puro y duro al llevar ahora a Pleno, a sabiendas que no se aprobaría y coincidiendo con el juicio al ‘procés’ en el Supremo, una iniciativa de modificación del Código Penal para castigar con cárcel a los organizadores de referendos ilegales. Ya se ha anunciado que esta, junto a la puesta en marcha inmediata y sin fecha de caducidad de un 155 en Cataluña sin ganan las elecciones, serán medidas estrellas de su programa electoral.

Los populares registraron esta proposición de ley a finales del pasado septiembre, a pocos días del primer aniversario del 1-O y se han decidido a defenderlo en vísperas de que las Cámaras sean disueltas, el 5 de marzo, por un adelanto electoral. Durante la defensa de la propuesta, la portavoz parlamentaria del PP, Dolors Montserrat, subrayó la importancia de una reforma que a su entender "fortalece" las instituciones y el Estado de Derecho, marcando distancia con el PSOE de Pedro Sánchez que quiere "arrodillarse" frente al separatismo.

"El PSOE siempre ha sido cómplice del nacionalismo para debilitar a España", llegó a decir Montserrat, poniendo como ejemplo la hipotética “barra libre" que le dieron con el Estatut o la derogación del Código Penal del delito de convocatoria de referéndum, una delito que, a su juicio, es "inexcusable" recuperar. En 2003, el Gobierno de José María Aznar lo introdujo al hilo de llamado 'Plan Ibarretxe'. Ya con José Luis Rodríguez Zapatero, dejó de ser delito. Pero lo que con toda intención obvió Montserrat es que durante los años que Mariano Rajoy estuvo en el poder no se repescó por decisión expresa del presidente. No consta públicamente que dirigentes populares, tampoco ella o Pablo Casado, se lo reclamaran.

LOS NARANJAS, APOYO MATIZADO

Los únicos apoyos que el PP logró sumar a su iniciativa fueron los de Foro Asturias (su socio electoral en esa comunidad) y los de Ciudadanos, pero con recadito incluido: el diputado naranja Nacho Prendes apostó por "mejorar" los instrumentos de la democracia para "defenderse" de sus "enemigos" porque "la democracia no está por encima de la ley", pero afeando a los populares que lleguen "tarde" con esta propuesta.

"¿Qué hacían mientras a su Gobierno le preparaban dos consultas, la del 9 de noviembre de 2014 y la del 1 de octubre de 2017?", preguntó Prendes, antes de censurar por "penosa" la gestión del 1-O que llevó a cabo Marino Rajoy y de criticar, una vez más, al presidente, Pedro Sánchez, por haber convertido en "socios" a quienes dieron un "golpe" en Cataluña.

Desde el PSOE, el portavoz de Justicia, Juan Carlos Campo, denostó los argumentos esgrimidos por el PP para justificar su iniciativa. "Cerraba los ojos y me veía en Colón", ironizó. Desde Unidos Podemos y ERC consideraron una "buena noticia" que los conservadores admitan públicamente que convocar un referéndum "no es ahora un delito", como "no lo fue el 1-O".