En hora y media larga de discurso, Pedro Sánchez ha repetido 64 veces la palabra "Gobierno", en 54 ocasiones ha pronunciado el término "cambio" y en otras 51 se le ha escuchado el vocablo "acuerdo". A "España" la ha mencionado 45 veces y a los "españoles", 31. El aspirante a la investidura ha pedido "diálogo" en 28 ocasiones y ha apelado a la "reforma" en otras 16.

Sin embargo, ninguna de estas palabras se ha quedado tan grabada en la cabeza de los oyentes como una expresión que ha repetido muchas veces, a pesar de que en el discurso escrito que el PSOE ha distribuido a la prensa brilla por su ausencia. Un latiguillo que ha introducido a medida que desgranaba las propuestas de gobierno pactadas con Ciudadanos: "Y todo esto lo podemos hacer la semana que viene".

Era un mensaje implícito a Podemos para que facilite su investidura y, con ella, un "Gobierno de cambio" que impida la continuidad del PP en el poder. "E insisto. Esto lo podemos poner en marcha la semana que viene, depende de muchos de los que están aquí presentes que pueda ser una realidad". Sánchez ha rematado con esta coletilla cada bloque temático de propuestas, como las referidas a la reforma laboral y al ingreso mínimo vital.