El Ayuntamiento de Móstoles ha asegurado que el próximo verano procederá al desamiantado del CEIP Alonso Cano, después de que la AMPA mostrase su preocupación ante la existencia de este material en la sobrecubierta de uralitas del edificio.

El concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines y Limpieza Viaria, Miguel Ángel Ortega, ha aclarado que ya se ha tratado el asunto con los padres y que se está elaborando un nuevo proyecto para la segunda fase de obras que incluirá el arreglo del lucernario, que es por donde podría filtrarse alguna fibra, y la eliminación de cubiertas, "donde se ha localizado".

Será a lo largo de este mes cuando lo presenten ante la Comunidad de Madrid para su aprobación definitiva, puesto que las actuaciones serán financiadas a través del Plan Regional de Inversiones de la Comunidad de Madrid (PIR).

Depende de la Comunidad

"Si todo va bien, estaremos actuando en junio o julio de este año, que es en el único momento que se pueden hacer este tipo de obras", ha indicado el edil.

En este sentido, ha querido dejar claro que una intervención de estas características, tanto en la detección como en la eliminación, le corresponde a la Comunidad de Madrid. "Aunque nosotros vamos a ir haciéndola con las limitaciones que tenemos", ha apostillado.

Antecedentes

Según ha detallado el edil, fue el 14 de febrero cuando la AMPA y la dirección del centro se pusieron en contacto con el Consistorio para transmitirle su preocupación ante la posibilidad de que hubiese uralita en la cubierta del CEIP.

"El 16 fue a inspeccionarlo un arquitecto municipal, tomó muestra del material y dio positivo", ha aseverado, insistiendo que a raíz de eso el Consistorio decidió cambiar el proyecto de obras e incluir la retirada de estos elementos en el plan.

También, según ha puntualizado, se ha insistido a los padres que se va a realizar el análisis detallado que solicitaban sobre la cantidad de fibras de amianto en el aire, así como la realización de un mapa de los puntos donde podría estar presente.

"No hay incide en la salud"

"Ya se ha encomendado que lo contrate a la empresa encargada para mayor tranquilidad de los padres y madres. Además, nos viene muy bien para demostrar que, en principio, unas placas de uralita que están en las cubiertas del colegio aisladas del centro no revisten ningún tipo de incidencia para la salud, más allá de la normal preocupación cuando uno sabe de la existencia de este mineral", ha dicho.

En este sentido, ha querido tranquilizar a los padres señalando que para que fuese peligroso sería preciso que se manipulen o rompan las mismas para que se desprendan fibras, y no es el caso porque la cubierta "está en perfecto estado de conservación".

Reunión conjunta

Ortega ha explicado que precisamente para tratar estos "temas que generan mucha alarma" se solicitó una reunión urgente desde la Concejalía de Educación y Medio Ambiente con la dirección general de Infraestructuras de la Consejería, "de la que aún no han recibido respuesta".

También aclara que para dar una solución global al resto de centros es necesario hacerlo de forma conjunta, y ha precisado o que en Móstoles hay 36 colegios públicos "todos ellos construidos antes de 2002, fecha en la que se prohibió en España la comercialización de la uralita". De momento, lo que han hecho desde el Gobierno local es dar la orden a la empresa de mantenimiento de que vaya revisando las cubiertas del resto de centros.

Finalmente, el edil ha criticado el que el Ejecutivo regional sea de las pocas comunidades que no tenga un plan de detección, ni de actuación en centros públicos con respecto al amianto.