Pimec ha calculado que el hecho que las elecciones del 21 de diciembre sean en día laborable implica que se dejarán de ganar 230 millones de euros, ha informado este viernes en un comunicado. El cálculo se basa en el coste de opotunidad, es decir, lo que dejarán de producir aquellas personas obligadas a constituir las mesas electorales y aquellas horas que los votantes se tomen de permiso laboral para ejercer su derecho a voto.

Cruzando estos datos estimados con los parámetros conocidos como el PIB medio por hora trabajada (36,35 euros), el censo electoral sin residentes extranjeros (5.329.139 personas) y la tasa de empleo en Catalunya (54,09%), la patronal ha concluido que el valor de la actividad económica que dejarán de producir los electores sube hasta los 217.238.448 euros.

En el caso de los votantes, se ha estimado que la participación electoral sería de alrededor del 77%, la misma que la de 2015, y que la media de tiempo para votar será de tres horas en el caso de los asalariados y de una hora para los empleados por cuenta propia.

Respecto a las mesas electorales, considerando que se constituyen un total de 8.240 por todo el territorio, con un presidente y dos vocales por mesa y un interventor por partido y mesa, si se estima que trabajan una media de ocho horas diarias, el valor de la actividad económica que dejarán de producir suma 12.962.332 euros.

Pimec ha lamentado la decisión de celebrar los comicios en día laboral por los importantes costes económicos y organizativos que esto representa para las empresas, y ha advertido de las dificultades que se encontrarán las pymes el 21-D, "ya que tienen menos recursos y una plantilla más pequeña".