El independentismo catalán volverá a dividirse previsiblemente hoy en el Congreso en la votación del suplicatorio que ha solicitado el Tribunal Supremo para investigar a la portavoz de JxCat, Laura Borràs. ERC desoirá el llamamiento de su socio en el Govern para arropar a la diputada posconvergente y se decanta por no participar en la votación. La CUP prevé imitar el gesto, con el que ambos grupos buscan evitar tanto su apoyo a la apertura de una causa en el Supremo que Borràs atribuye a razones políticas como rechazar que se investigue un posible caso de corrupción. A JxCat no le satisface esta opción y advirtió ayer de que «la única posición digna y coherente» es votar no.

No participar en la votación es la posibilidad que cuenta con un mayor consenso en ambos partidos. Y a esta posición podría sumarse EH Bildu. El suplicatorio saldrá adelante, dado que cuenta con el apoyo, al menos, de PSOE, PP, Vox, Unidas Podemos y Cs.

El Tribunal Supremo quiere que la Cámara baja levante la inmunidad a Borràs para poder investigar si incurrió en delitos de fraude a la Administración, malversación de caudales públicos y falsedad documental durante su etapa de directora de la Institución de las Letras Catalanas (ILC). A la portavoz de la formación posconvergente en el Congreso se le acusa de haber facilitado la adjudicación presuntamente irregular de una serie de contratos a un amigo por valor de casi 260.000 euros.

Como es aforada y solo puede ser juzgada por el Supremo, la Comisión del Estatuto de los Diputados ya votó a favor de tramitar el suplicatorio, gracias al apoyo de PSOE, PP, Vox y Cs, pero el pleno del Congreso debe aprobarlo hoy, en una sesión a puerta cerrada. Dado que la votación es secreta, podría haber diputados que se desmarquen de las posiciones de sus partidos.

Podemos tiene previsto hoy apoyar el suplicatorio en el pleno para no oponerse a una investigación por corrupción, pero alertando de que estará vigilante.