Esquerra y la CUP presionan a sus socios para que el 'Parlament' apruebe la ley de transitoriedad jurídica antes del referéndum previsto para el 1 de octubre, aunque solo entraría en vigor si ganase el ‘sí’ en las urnas.

Los republicanos pretenden evitar posibles interpretaciones dispares sobre el resultado de la consulta que puedan reabrir el debate sobre la ley pactada y además dar seguridad ante un supuesto vacío legal. Para los 'cupaires', esta fórmula garantiza la"irreversibilidad" pero miembros del PDECat han evitado posicionarse teniendo en cuenta que aún se está debatiendo.

Está previsto que esta ley se explique públicamente durante la última semana de julio, tras acordarse una ley separada para el referéndum. La ley de transitoriedad es la que debe permitir establecer una nueva legalidad catalana, por lo que ERC siempre ha defendido que si gana el ‘sí’ se debe saltar de la legalidad española a la catalana.

La CUP, por su parte, considera que se debe aprobar la ley del referéndum y después la de transitoriedad, siempre antes del 1-O. La tramitación de ambas leyes se dejará para la segunda quincena de agosto y, según apuntó el ‘vicepresident’ Oriol Junqueras, la previsión es que la Cámara catalana apruebe la del referéndum a principios de septiembre.