Los republicanos permanecen a la espera de recibir una proposición sellada de Junts per Catalunya en la que resuelvan cómo pretenden investir a Carles Puigdemont como 'president'. Conscientes de su pérdida de incidencia política al quedar a la cola de los posconvergentes en las urnas, desde ERC no idearán, al menos "a día de hoy", ninguna estrategia que pueda resquebrajar estos planes.

El portavoz del partido, Sergi Sabrià, ha evidenciado este martes en una entrevista en RAC1 que se postran a JxCat. Se ha mantenido expectante a ver "cómo se hace efectiva" la restitución de Puigdemont, algo que ha dejado en todo momento "en manos del PDECat, CDC y JxCat" a quienes les ha urgido una respuesta. Ha evitado contrarestar en más de una ocasión que la "propuesta ganadora es muy clara" y ha censurado que están "dispuestos a apoyarla".

Eso sí, los republicanos quieren asumir responsabilidades en el nuevo Govern y prevén que el líder de su formación, Oriol Junqueras, será vicepresidente pese a las informaciones que desestiman su posible excarcelación, algo que complicaría su participación en el nuevo Ejecutivo.

Poca confianza en la excarcelación de Junqueras

De hecho, Sabrià ha reconocido que es "poco probable" que el desenlace de su declaración ante el Tribunal Supremo prevista para este jueves sea su libertad condicional. Ahora bien, ha considerado que es "difícil" hacer previsiones judiciales "cuando las decisiones no se toman en función de la justicia sino de decisiones políticas".

Poco esperanzado, ha apuntado que su formación trabaja "pensando en que Oriol no les acompañará durante un tiempo" y ha descartado que contemplen "alternativas" a la voluntad de JxCat. Todo lo que salga del guión dibujado hasta ahora lo ha tachado de "política de ficción" y ha mostrado su afán de moldear un Govern lo más parecido al cesado.

En este sentido, ha asegurado que "no es una certeza" pero si una "opción" que ERC asuma la presidencia de la Mesa del Parlament, y ha dejado en manos de su decisión personal una eventual repetición de Carme Forcadell al frente de la Cámara catalana. Estas negociaciones que se debaten al tiempo que la configuración del Ejecutivo, algo que Sabrià ha celebrado por su "discreción", en comparación a las sucedidas tras los comicios del 2015 cuando fueron "televisadas y radiadas".

El portavoz de ERC ha reivindicado que "sería bueno para todos que esta legislatura superara los tres años", ha descartado fijar plazos como en el anterior Govern y ha insinuado que "desobedecerán" porque aplicarán algunas de las leyes aprobadas en la Cámara y suspendías después por el Tribunal Constitucional (TC), como la ley de pobreza energética. "En la etapa que viene no pediremos permiso", ha sentenciado Sabrià.