El curso escolar y la docencia presencial se dan por terminadas y las clases no se reanudarán hasta el próximo mes de septiembre. Sin embargo, hasta entonces las escuelas sí podrán abrir para cuidar a los niños cuyos padres no se puedan hacer cargo de ellos debido a su jornada laboral, o para examinar a los alumos de Bachillerato que quieran acceder a la universidad. Así lo anunció ayer el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en la comparecencia en Moncloa tras la reunión del Consejo de Ministros, donde se ha aprobó el plan de desescalada tras el confinamiento que ha provocado la pandemia del coronavirus.

«El curso escolar comenzará en septiembre», dijo Sánchez descartando la posibilidad de que los estudiantes pudieran regresar al menos unos días a sus clases este curso, un anhelo que mantenía la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá. No será así, y si bien se podrá mantener la docencia a través de formatos telemáticos, las clases no se podrán reanudar hasta el inicio del nuevo curso escolar el próximo mes de septiembre.

Sin embargo, a medida que vayan avanzando las fases previstas para el desconfinamiento, las escuelas podrán abrir bajo dos supuestos muy concretos. Uno de ellos, para cuidar de los niños cuyos padres deban ir presencialmente a sus lugares de trabajo, pero con aforo limitado.

actividades de REFUERZO / También podrán volver a los centros escolares adolescentes de cuarto de la ESO, Bachillerato o Formación Profesional que necesiten realizar actividades de refuerzo escolar y los alumnos de escuelas con necesidades educativas especiales. Esto podrá beneficiar a las familias más vulnerables en España cuyos niños no están pudiendo desarrollar ninguna actividad educativa debido a que no tienen acceso a internet, ordenador ni otros medios telemáticos, como ya vienen denunciando desde distintas oenegés.

Estas medidas, sin embargo, solo se podrán aplicar cuando en la zona afectada se aplique la fase dos del plan de desescalada, que se prevé para finales de mayo pero que se debe ir considerando en función de la evolución del virus en cada provincia, según detalló el presidente. Antes, durante la fase 1, los centros deberán ser desinfectados para evitar posibles nuevos contagios.

El plan se ha aplicado para que los padres no deban recurrir a otras personas que tengan un mayor riesgo de contagio. «Si estamos planteando una nueva normalidad, van a existir problemas de conciliación, porque habrá padres y madres que irán a trabajar y no tendrán la posibilidad de dejar a los niños con los abuelos, porque son un colectivo vulnerable ante el coronavirus», reconoció Pedro Sánchez.

UNIVERSIDADES / Aunque el curso presencial se da por terminado, también las universidades podrán abrir sus puertas. En este caso, para poder acoger los estudiantes de bachillerato que deban hacer las pruebas de acceso a la universidad, la antigua Selectividad. Unas pruebas que el propio presidente definió como «uno de los principales hitos que tenemos en nuestro país para miles y miles de jóvenes». Se descarta, pues, un examen telemático para estas pruebas, aunque sí que se deberá plantear la medida para aquellos estudiantes universitarios que no podrán acabar el curso de forma presidencial.

En relación a las pruebas de la EVAI, el Gobierno ha establecido que se celebrará del 22 de junio al 10 de julio de forma presencial en aulas de universidades de toda España. Unas fechas que han tenido que retrasarse, ya que antes de la pandemia los estudiantes ya se hubieran examinado a mediados de junio.

Fue en el mes de marzo cuando el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas decidieron posponer las pruebas una vez decretado el estado de alarma en el país. De media, cada año más de doscientos mil estudiantes de Bachillerato de toda España realizan estos exámenes para acceder a la universidad.