El aviso llegó a primera hora de este lunes y el Gobierno lo ha confirmado unas horas después. España establece el control de sus fronteras terrestres para disminuir el riesgo de propagación del coronavirus. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunciado esta medida en rueda de prensa desde la Moncloa.
La restricción entra en vigor desde la medianoche y durará hasta que concluya el estado de alarma. Hasta ese momento, solo podrán acceder al territorio nacional ciudadanos españoles, residentes en España, trabajadores transfronterizos, y a aquellos que acrediten documentalmente causas de fuerza mayor o situación de necesidad.
El cierre de fronteras terrestres no afectará al transporte de mercancías para asegurar la cadena de abastecimiento. Tampoco, a miembros de oficinas diplomáticas y consulares. Los españoles que estén fuera del país en este momento podrán regresar. No afecta a Gibraltar ni a Andorra.
Para poder reestablecer los controles fronterizos intervendrán agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, el Ejército y también las policías autonómicas, Ertzainza y Mossos de Esquadra, puesto que estos dos territorios tienen límite con Francia.
Marlaska ha dejado la puerta abierta a aumentar las restricciones en los próximos días. En concreto, no ha descartado el cierre del espacio aéreo y de puertos, una medida que se aplicará en función de los acontecimientos. "Si las circunstancias exigen esas medidas se adoptarán esas medidas en el momento oportuno", ha señalado.
El anuncio llega poco después de que la Comisión Europea haya recomendado el cierre de las fronteras. Este martes a las 17 horas se ha convocado un Consejo Europeo en el que los presidentes se coordinarán para afrontar la pandemia. En todo caso, la decisión del Gobierno español llega después de la conversación de Pedro Sánchez con sus homólogos francés y portugués para prevenirles de este anuncio.
Sanciones y multas
Grande-Marlaska ha destacado como consecuencia de la declaración del estado de alarma que se ha registrado una "reducción manifiesta" del tráfico y ha puesto como ejemplo que ayer por la noche fue de más del sesenta por ciento en las entradas a Madrid en comparación con otro fin de semana. "No se han producido incidentes relevantes y estamos en unos términos de normalidad dentro de las circunstancias extraordinarias en el cumplimiento por parte de la sociedad y de la ciudadanías de todas las medidas acordadas por el Gobierno como consecuencia del real decreto declarando el estado de alarma", ha añadido.
Ha recordado que "hay órdenes de que se cumpla el real decreto de estado de alarma porque hay cosas muy serias con las que toda la sociedad está comprometida que es salvaguardar la salud, que es un deber de solidaridad de unos con otros".
Así, "la imposición de sanciones al renuente a cumplir la normativa y al insolidario se basa en parámetros de proporcionalidad y no hay otra finalidad pues lo que la sociedad en general trata es de que todos seamos solidarios y está sociedad es solidaria, con lo cual la respuesta de sanciones es mínima", ha apostillado.
Coordinación y cárceles
El ministro ha asegurado que la coordinación de las Fuerzas de Seguridad del Estado, Policía Nacional y Guardia Civil, con las policías autonómicas, Mossos d'Esquadra, Ertzaintza y Policía Foral de Navarra "funciona normalmente y es máxima".
Sobre la situación de las cárceles ha agradecido el difícil trabajo de los funcionarios de prisiones pero también "el grado de cooperación de los internos. "Entienden que se les limiten derechos de comunicación para garantizar la salud no solo de ellos que están en unas circunstancias muy específicas sino también la de sus familiares, amigos y terceros que asisten a comunicar con ellos", ha indicado.
