El expresidente de Isolux Corsán Luis Delso negó este lunes ante el tribunal que juzga la primera época del 'caso Gürtel' ser la persona identificada como "Luis el cabrón" que recibió un pago de 72.000 euros de la trama y lamentó el "trastorno" que le había causado tanto a él como al extesorero del PP Luis Bárcenas su identificación con tal apodo. Delso, que está imputado en el 'caso Pujol', por su vinculación con Jordi Pujol Ferrusola, ha declarado como testigo en la Gürtel.

Delso, que dijo desconocer que el cabecilla de la trama Gürtel,Francisco Correa, le llamara "Luis el cabrón", explicó que tuvo mucho trato con el empresario y llegó a hacer amistad con él, pero negó haber participado en algún negocio con él o haber recibido alguna cantidad de él o de susu empresas.

En su declaracion ante el tribunal, Correa aseguró que el pago de 72.000 euros que aparece en la contabilidad de la trama a "Luis el cabrón" se refería a Luis Delso y no a Bárcenas, por el préstamo personal que el que era presidente de Isolux había hecho a su empleado en Valencia, Álvaro Pérez, 'el Bigotes'.

Sin embargo, el testigo admitió el préstamo, pero cifró la cantidad en 60.000 euros. Explicó que le pidió a 'El Bigotes' que le presentara al presidente de la Generalitat valenciana, entonces Francisco Camps, aunque él podía haberlo hecho directamente como directivo de una empresa con miles de empleados.

Y que accedió a hacer el préstamo a Pérez después de que este le "llorara mucho por un problema familiar, de su padre, por una deuda con la Seguridad Social o con Hacienda". Aseguró que 'El Bigotes' le pidió 15 millones de pesets, pero sólo le entregó los 10 (60.000 euros), que le devolvió "año y pico después" los 60.000 euros a lo largo de 2007, pero no podía decir si en junio, momento en el que aparece el pago a "Luis el cabrón".

Delso que aseguró que no documentó el préstamo, porque si tiene que hacer eso con un amigo, prefiere no prestarle el dinero. Según el testigo, la única relación de Correa con este préstamo fue que una vez le llamó por teléfono para decirle que había sido "tonto", porque Pérez "vivía por encima de sus posibilidades".