Nadal, acaso el dibujante más elegante de todos los que conformaron la llamada segunda generación de la Escuela Bruguera (la formada por Ibáñez, Vázquez, Raf, Figueras, Segura o Martz Schmidt),falleció el 26 de junioen Barcelona a los 85 años. Àngel Nadal Quirch no alcanzó la celebridad de algunos de sus compañeros de factoría porque su estancia en Bruguera fue relativamente corta (entre 1948 y 1960) y porque durante buena parte de su carrera trabajó para el mercado extranjero a través de agencias internacionales, pero aun así creó dos series fundamentales de la historia del tebeo español, 'Casildo Calasparra' y, sobre todo, 'Pascual, criado leal'.

Nacido en Barcelona en 1940, Nadal empezó muy joven a dibujar de forma profesional y, después de publicar historietas de aventuras y de humor en diversas publicaciones, entró a trabajar en Bruguera a los 18 años. Allí alumbró varios personajes para la revista 'Pulgarcito': Casildo Calasparra (1948), un extraviado oficinista casado con una mujer tan hermosa como autoritaria; Sandalio Pergamín (1948),Don Folio (1951), Don Cloroformo (1951) y el criado Pascual (1953), un pícaro mayordomo que trabaja al servicio de un mezquino aristócrata y a través de cuyas peripecias Nadal trazó un afilado retrato social (al menos, hasta que la censura obligó a rebajar la carga satírica de los guiones).

También destacó Nadal por su habilidad para dibujar mujeres de bandera, elegantes y modernas, y a ellas dedicó dos series de ilustraciones: ' Las mujeres de Nadal' (1954) y 'Las chicas de Nadal' (1958). En 1960, abandonó Bruguera (y, con ello, las posibilidades de trabajar en el mercado español) y empezó a dibujar para agencias internacionales. En esta etapa creó series como 'Buster' y 'Barney Bluffer' e incluso dibujó personajes de Disney, como Mickey Mouse y Goofy, para una editorial danesa.