La Fiscalía de Granada pide nueve años de prisión por abuso sexual continuado con acceso carnal para el padre Román, único implicado en el caso Romanones, que se investiga desde octubre de 2014 tras la denuncia de la supuesta víctima, que asegura que abusaron sexualmente de él cuando era menor de edad.

En el escrito provisional de calificación de los hechos del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Efe, la Fiscalía plantea para el único procesado en la causa una condena de nueve años de cárcel y el pago de una indemnización de 50.000 euros a la víctima, cuantía de la que responde de manera subsidiaria el Arzobispado de Granada.

El pasado mes de marzo, la Audiencia de Granada acordó la apertura de juicio oral y confirmó el auto dictado en enero por el Juzgado de Instrucción 4 en el que daba por concluido el sumario de la causa.

El caso se abrió después de que un joven que ahora tiene 25 años pusiera los hechos, ocurridos supuestamente cuando contaba entre 14 y 17, en conocimiento de la Fiscalía andaluza, y sobre los que llegó a pronunciarse el papa Francisco.

Durante la declaración indagatoria el padre Román atribuyó la denuncia a un móvil económico y explicó que únicamente tenía, como sacerdote, un "amor fraterno" por el denunciante de los supuestos abusos.