Mariano Rajoy y José María Aznar han coincidido este martes en un acto de homenaje al escritor Mario Vargas Llosa, que este lunes cumplió 80 años de edad. En la foto de familia previa al acto, que ha tenido lugar en la Casa de América de Madrid, el presidente del Gobierno en funciones y el exlíder del PP han evidenciado su distanciamiento: ni siquiera se han saludado y se han esquivado las miradas. Quizá para evitar ese saludo, Aznar no ha estrechado la mano de ninguno de sus compañeros de 'photocall', entre los que se encontraban el expresidente Felipe González y el propio Vargas Llosa.

Ambos han acaparado la atención mediática al inicio del foro porque se trataba de la primera vez que coincidían en público desde la reunión de la ejecutiva del PP que se celebró el día siguiente de laselecciones generales, en las que los populares perdieron 3,6 millones de votos y 63 escaños.

En aquella reunión, el expresidente del Gobierno pidió un "congreso abierto" y señaló que él no tenía intención de presentarse. Rajoy le respondió entonces que ese cónclave se hará cuando acabe el proceso deformación de gobierno, una tesis que ha seguido defendiendo en las últimas semanas cuando se le ha preguntado por este asunto.

NUEVOS LIDERAZGOS

Con estos precedentes, poco le habrá gustado al presidente en funciones que, en su intervención en el homenaje, Aznar haya reclamado "nuevos liderazgos capaces de ejercer una tracción social, moral y política a la altura de los desafíos que tenemos". Rajoy, por su parte, ha preferido hacer un llamamiento a "dignificarel ejercicio de la política" para no "dar pábulo al populismo".

Al término del acto, la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid y expresidenta madrileña, Esperanza Aguirre, ha valorado los discursos pronunciados por ambos líderes y ha escogido su favorito: "A mí me han gustado los dos, pero si tengo que elegir, en este caso me ha gustado más el de Aznar".