El Gobierno ha asegurado este jueves, tras la detención de un francotirador que supuestamente planeaba atentar contra el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, que la seguridad del presidente "en ningún caso se ha visto comprometida".

Fuentes del Gobierno han tildado de "incidente" la detención de este hombre a mediados de septiembre y han incidido en que "este tipo de amenazas es una constante", a la que, no obstante, no hay que acostumbrarse. Las mismas fuentes han agradecido las muestras de solidaridad recibidas y han subrayado que "es necesario seguir trabajando por la serenidad en el debate político".

La presidenta del PSOE, Cristina Narbona, ha contado este jueves que Sánchez confirmó personalmente a su ejecutiva esta mañana la noticia. Además, ha agradecido a los Mossos la gestión del incidente, y también las muestras de solidaridad que está recibiendo tanto el Gobierno como el PSOE.

Además, fuentes de Interior han informado a EFE de que el tirador ya se encuentra en prisión.

EXPERTO FRANCOTIRADOR

El francotirador planeaba atentar contra el presidente del Gobierno como venganza por su decisión de exhumar de los restos de Francisco Franco del Valle de los Caídos, según el diario Público.

Los Mossos solicitaron una orden de entrada y registro del domicilio de Manuel M., donde el pasado 19 de septiembre hallaron 16 armas de fuego cortas y largas, incluido un fusil de asalto militar Cetme, un subfusil ametrallador checoslovaco Skorpion vz. 61 y cuatro rifles de alta precisión, capaces de acertar un blanco hasta a 1.500 metros de distancia. Además, en su coche llevaba dos pistolas, una de ellas modificada e ilegal.

El detenido era un experto tirado y frecuentaba ambientes ultraderechistas, pero nunca había participado en actos violentos, por lo que no tenía antecedentes policiales y no estaba controlado por las fuerzas de seguridad.