El Gobierno contiene la respiración ante lo que pueda deparar este martes la reunión en la que el Govern tiene previsto, tal como ha anunciado, que Oriol Junqueras y Raül Romeva asuman la compra de urnas para el referéndum. Si se convierte en un "acto administrativo firme" y no solo es otro "anuncio de anuncio", el Gobierno lo podría recurrir, tal como advirtió el portavoz del Ejecutivo, Íñigo Méndez de Vigo, ya el pasado viernes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Este mismo martes, el también ministro de Educación ha recordado a los independentistas que, en esta ocasión, no pueden alegar, como en los procesos judiciales tras el 9-N, que no sabían las consecuencias, puesto que el Tribunal Constitucional ya ha dictaminado que cualquier acto preparatorio de un referéndum es "ilegal".

"Siendo un acto ilegal y sabiéndolo [...] que asuman las consecuencias,tendrán que pagar por ello", ha remachado. Asimismo ha recordado que "ni un duro" puede destinarse a la compra de urnas para el 1-O.