El exvicepresidente socialista se muestra sorprendido por la pasividad con la que el conjunto de la sociedad española está contemplando “la puesta en práctica de un golpe de Estado en Cataluña”, a diferencia del 23-F cuando los golpistas intentaron subvertir la democracia. “Ahora la actuación de Puigdemont, Junqueras y otros émulos de Tejero y Milans del Bosch no han tenido una respuesta semejante”.

En opinión de Guerra, cuando lo que está en juego es la paz civil, la convivencia y la democracia, “no caben posiciones tibias” ni es aceptable “la posición de perfil”. Ante esta situación, sólo existe una posición ética: “oponerse con todos los instrumentos que proporciona la democracia y la Constitución”.

En este sentido, opina que el Gobierno terminará aplicando el artículo 155 de la Constitución, “redactado precisamente para circunstancias como la que estamos viviendo, y aprobado por unanimidad, con la complacencia de los nacionalistas”. “¿Qué clase de demócratas han aparecido en España que apoyan la Constitución menos el artículo 155?”, se pregunta.