El actual portavoz en el Congreso del Partit Demòcrata Català y 'exconseller' de Presidència, Francesc Homs, declarará este lunes ante el Tribunal Supremo por su participación en el proceso participativo del 9-N. Lo hará arropado por una comitiva encabezada por el expresidente Artur Mas, también investigado por los mismos hechos. El diputado defenderá que no ha cometido el delito de desobediencia y volverá a remarcar el cariz político del proceso judicial abierto por el 9-N.

Este domingo Homs ha afirmado, en un acto en Arenys de Munt, que declarará "en nombre del conjunto del país". "Mirándoles fijamente a los ojos les podremos decir que nosotros representamos unos valores, una voluntad insobornable e inalterable", ha añadido. En el mismo acto, Mas ha proclamado: "Estoy convencido de que no desobedecimos al TC. De lo que estoy seguro al 100% es que lo que hicimos fue obedecer al pueblo de Cataluña, que nos había pedido las urnas".

LAS BASES DE LA FISCALÍA

La declaración como investigado de Homs (que es aforado al ser diputado y por ello debe declarar en el Supremo) se debe a la carta que remitió el 6 de noviembre del 2014 cuando era 'conseller' de Presidència a su homólogo Felip Puig, titular de Empresa i Ocupació, en la que indicaba que los servicios que se habían encargado a la empresa T-Systems -que diseñó los programas informáticos para la votación- no estaban "explícitamente" afectados por la decisión del Tribunal Constitucional de suspender el 9-N.

El pasado mes de mayo, los magistrados del Supremo hicieron suyo el criterio de la fiscalía y vieron indicios para investigar los actos del político en la preparación del 9-N. Los fiscales Francisco Bañeres y Emilio Sánchez Ulled sostienen que Homs tuvo "un comportamiento consciente e intencionado" de "indudable trascendencia" encaminado a garantizar que los preparativos de la consulta alternativa continuaran su curso, "soslayando" la suspensión decretada por el Tribunal Constitucional.