«Hemos sido capaces de superar una profunda crisis y convertirnos en el segundo partido de Cataluña (..) Y lo digo sin tapujos: quiero ser el próximo presidente de la Generalitat. Estamos hartos de perder tiempo y energías, estamos cansados de frustraciones y de divisiones, estamos hartos de que se caven trincheras y se levanten muros», clamó ayer Miquel Iceta en la clausura del PSC.

El líder del PSC, Miquel Iceta, reivindicó a los socialistas como alternativa frente al actual «desbarajuste» del gobierno de la Generalitat y como la única fuerza capaz de romper la política de bloques que se ha instaurado en Cataluña como consecuencia del «procés». «Hay un camino para superar el fracaso del independentismo. En Cataluña hay un partido sólido, coherente, fiable, unido, ¡muy unido!, que propone otro rumbo para nuestro país», exclamó.

«Diálogo entre los que pensamos diferente», reivindicó Iceta, agradeciendo la presencia de Ferran Bel, de JxCat. «Trabajemos con ellos para hacer un país mejor». Y es que el líder del PSC volvió a reclamar dejar atrás la confrontación para avanzar en la cooperación. «Lo que hemos conseguido en el PSC, ahora lo queremos para Cataluñaa», sentenció antes de insistir nuevamente en que quiere ser el próximo president.

Iceta, ya en la apertura del Congreso le había mandado un mensaje muy claro a Pedro Sánchez: «Que sepa que nos tiene detrás, al lado, donde haga falta. Por Cataluña, por España, por el socialismo y por el diálogo», y tras destacar su «sintonía profunda» reivindicó la Declaración de Barcelona, que ambos suscribieron hace dos años, y la de Granada. En ella, entre otras cosas, aprobada en este congreso también, el PSC defiende la idea de que «España es una nación de naciones», lo que ha generado polémicas.