A 24 horas de que terminen unas votaciones cruciales en Podemosque determinarán qué reglas del juego se aplican en el congreso de la formación, las 'pablistas' o las 'errejonistas', los líderes de ambas corrientes han tratado este lunes, en sendas entrevistas, de restar importancia a la división interna y vender las bondades de que en una organización política "se construya la unidad discutiendo". Sin embargo, las enormes diferencias entre ambos se evidencian cuando cada uno defiende con behemencia su modelo organizativo para Vistalegre II. Además, Pablo Iglesias ha evitado confirmar que Íñigo Errejón continuará como número 2, desde la secretaría política.

El líder de Podemos ha tratado de limar esperezas asegurando que ni se va a "cargar, ni va a asesinar, ejecutar o relevar" a Errejón porque "evidentemente" es uno de los mejores "talentos" del partido morado. Pero se ha limitado a señalar que él lo quiere tener "cerquita", "a su lado, no frente" a él y que le "encanta" su trabajo como portavoz parlamentario. Nada sobre su lugar en la próxima dirección que salga del congreso, que se celebrará a mediados de febrero y donde está por ver si Errejón se atreve a presentar una candidatura diferente a la de Iglesias. Sus próximos pasos dependerán en gran manera del resultado de la votación sobre las reglas del juego. Él defiende que el proyecto político se vote de manera diferente a las listas, con la vista puesta en que si gana su estrategia, luego Iglesias tenga que aplicarla, sin necesidad de dar él el paso de disputarle la secretaria general. Sin embargo, el líder de Podemos defiende una votación conjunta, para así minar la posibilidades de los errejonistas. Y los anticapitalistas, próximos a Iglesias, propugnan el relevo de Errejón como número 2.

PERSONALISMOS Y SOBERBIA

"No concibo que se vote a la gente porque te caiga bien y no porque se está de acuerdo con las ideas", ha insistido Iglesias este lunes en 'El programa de Ana Rosa'. El dirigente ha acusado "a los compañeros de Errejón" de defender un "sistema personalista" mientras que él aboga por un modelo "más proporcional" que "protege a las minorías". Aún así, ha reconocido que en Podemos ha habido "un exceso de personalismo" en torno a él y a Errejón y ha admitido que, en ocasiones, como secretario general se ha comportado con "soberbia".

Errejón ha coincido con Iglesias en que Podemos debe encaminarse hacia un "organización más abierta, que no dependa de un portavozo dos", y cómo crítica velada hacia el modelo que ahora dirige Iglesias ha pedido un partido "más abierto, democrático y plural". En este sentido, en una entrevista en Radiocable ha aseverado que su propuesta de organización del congreso es más "proporcional" que la de Iglesias.

Más allá de los tecnicismos en torno al cónclave, el responsable político ha vuelto a reconocer que podría ser laminado tras el congreso. Así, ha asegurado si sus tesis no triunfan en Vistalegre II, "él estará donde sea más útil" porque en Podemos todos están "de paso".