Pablo Iglesias ha oferecido a Pedro Sánchez un pacto que no incluya a Ciudadanos para finiquitar el Gobierno del PP en su discurso de defensa de la moción de censura en el Congreso. El líder de Podemos ha dicho que asume los posibles "errores" que haya cometido en el pasado (no los ha concretado) pero sigue insistiendo en que deben buscar una mayoría parlamentaria alternativa, que esquive al partido de Albert Rivera. Esa exclusión fue el principal escollo en las fallidas negociaciones por la gobernabilidad, tras el 20-D. Desde la tribuna, Iglesias ha vuelto a proponer un pacto entre PSOE y Podemos abierto a otras fuerzas para sumar hasta la mayoría imprescindible pero sin C's.

"Ojalá lleguemos a un acuerdo para sacarles del Gobierno más pronto que tarde. Pero seamos francos, no nos digan que necesitan a la muleta naranja", ha advertido. Escuchándole, la bancada socialista, con el portavoz José Luis Ábalos al frente. Sánchez, que renunció a su escaño el pasado octubre, no acude a la sesión.

Con esa habilidad tan suya para lanzar dardos a quienes tiende la mano, Iglesias ha afeado al PSOE haberse abstenido en la investidura de Rajoy. "En el pasado no nos entendimos y asumo los errores que pude cometer (…) pero nosotros no robamos, ni damos aire a los corruptos", ha impugnado.

"La diferencia es que a nosotros ni nos callan, ni nos compran, ni nos obligan a desdecirnos", ha advertido.

Iglesias ha comenzado su discurso agradeciendo la presencia de los alcaldes del cambio en la tribuna de invitados del hemiciclo. Los ha puesto como ejemplo de la gestión solvente de Podemos y como escudo contra la campaña del "miedo" que, ha lamentado, azuza el PP en su contra. "Nos han visto gobernar en los ayuntamientos. Ustedes ya no pueden apelar al miedo. Seguro que hacemos algunas cosas mal, pero no robamos", ha señalado, para sumergirse en una detallada crítica contra la corrupción. "En las instituciones se está mejor que en la carcel", ha ironizado.

MONTERO Y CATALUNYA

La ponente de la moción de censura, Irene Montero, ha lanzado un duro (y largo) alegato contra el PP en el discurso que abre el debate en el Congreso, centrado en la explicación de "la trama", los escándalos de corrupción y, también, la defensa del derecho a decidir de los catalanes.

Montero ha acusado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de ser el responsable del conflicto territorial y de espolearlo con su decisión de recurrir ante el Tribunal Constitucional (TC) l'Estatut d'Autonomia.

"Fue usted, señor Rajoy, quien prendió la mecha contra Catalunya", ha reprochado y le ha acusado de "reventar" el acuerdo asumido por los catalanes y el Parlamento. Ha señalado al PP como culpable de "romper los lazos de la hermandad" entre catalanes y españoles y ha asegurado que Rajoy situó al líder del PP en Catalunya, Xavier García Albiol, con el fin espurio de agitar el debate y ganar votos en el resto del mapa. Se ha referido al dirigente catalán como"xenófobo".

"Ustedes pueden torcer la historia, pero no nos pueden poner a pelear entre nosotros, y la España que está en marcha lleva la bandera de fraternidad", ha defendido y ha acusado al PP de sostener a un patriotismo financiero que perjudica a los trabajadores y solo favorece a las élites extractivas. "No quieren ustedes que decidan los ciudadanos, pero están encantadísimos de que decidan los buitres financieros", ha criticado.

Frente a los que espolean la tensión territorial, Montero ha reivindicado el derecho a decidir y ha asegurado que con el PP en la Moncloa los catalanes no podrán ejercer su derecho a opinar sobre la independencia.

A las dos horas largas de discurso, el PP ha bromeado con lo largo de la intervención de Montero en las redes sociales, apelando aÍñigo Errejón, que ocupaba el cargo de portavoz hasta que esta le relevó con la victoria pablista. También Coalición Canaria protesta.