Pablo Iglesias se comprometió este lunes a exprimir hasta el último esfuerzo para tratar de llegar a un gobierno de coalición con el PSOE en las negociaciones que se retoman a final de esta semana, pero advirtió que, si no lo consigue, prefiere evitar la sensación de derrota. "Yo lo voy a intentar. He decidido ponerme al frente. Quiero ser optimista, ojalá se pueda, pero si tiene que haber elecciones hay que desdramatizar", opinó en una entrevista en El Hormiguero, en la que volvió a pedir a Ciudadanos que se abstenga.

"Absteneos por lo menos, dejad que lo intentemos con el PSOE. Si no te abstienes, Albert, va a haber elecciones", solició, después de explicar las dificultades que entraña negociar con el partido naranja por la manifiesta incompatibilidad que han expresado ambas formaciones, que se consideran antagónicas en política económica. "Es como si a un vampiro le enseñas un crucifijo", bromeó, para ejemplificar la reacción de Ciudadanoscuando se les plantea un acuerdo con Podemos.

El secretario general volvió a manifestar su preferencia por gobernar con Pedro Sánchez que liderar la oposición, a pesar de que admitió que estar en el mismo ejecutivo que los socialistas comportará un desgaste inevitable para la formación morada, en especial tras conocer el desborde del déficit, que implicará que el próximo gabinete tenga que asumir recortes de 25.000 millones de euros. "Sé que si gobernamos con el PSOE muchas veces vamos a decepcionar, pero aún así las cosas se cambian desde el gobierno", reconoció.

Preguntado por la crisis interna en Podemos, restó importancia a las divisiones con su número dos y aseguró que preservan la amistad."Iñigo es sobrio y serio por naturaleza. La sonrisa y la parte desenfadada me toca ponerla a mí", bromeó cuando le preguntaron por el tono circunspecto del secretario político tras ladestitución fulminante de Sergio Pascual, su colaborador de confianza.

Errejón participó también en el programa, con una intervención en la que se mandaron "un abrazo como en el de las [elecciones] europeas" y en el que el estratega le dijo que le aceptaba todo salvo"un beso como el de Xavi Domènech", en referencia al que Iglesias estampó al líder de En Comú Podem tras una intervención en el hemiciclo del Congreso.

Como despedida en el programa, Iglesias tocó la banda sonora de su serie preferida, Juego de Tronos, en unos timbales.