Una vez conocidos los informes preliminares policiales sobre los atentados de Barcelona y Cambrils (Baix Camp), el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha convocado para este sábado una reunión extraordinaria de la mesa de valoración de la amenaza terrorista para revisar el nivel 4 de alerta antiterrorista, vigente en España desde el 26 de junio del 2015, tras los atentados vividos en Francia, Túnez, Kuwait y Somalia.

A la reunión, presidida por el ministro, asistirán el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, y los máximos responsables de la lucha antiterrorista en España de la Policía Nacional, de la Guardia Civil, del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), de los Mossos d'Esquadra y de la Ertzaintza. Tras el encuentro, Zoido se desplazará a la Moncloa para informar de las conclusiones alcanzadas al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Por encima del 4 solo está el 5, previsto en situaciones de riesgo "muy alto" y que implica recurrir al Ejército para contribuir a aumentar la presencia policial en las calles y así lograr una mayor sensación de seguridad para los ciudadanos. Pero el que los militares participen en algunos operativos, como realizar labores de "vigilancia y protección de infraestructuras críticas", para así liberar a los agentes de la Guardia Civil que los desarrollan habitualmente, dificulta que se decida establecer.

DIFERENCIAS CON FRANCIA O ITALIA

Los expertos consultados sostienen que en otros países de nuestro entorno, como Francia o Italia, es más sencillo, porque la gendarmería francesa y los carabinieri disponen de unidades militarizadas que es a las que se recurre en estas situaciones. De ahí que consideren difícil que se pueda llegar a adoptar el nivel 5, que incluye la posibilidad de decretar la "restricción y control del espacio aéreo".

El nivel 4 supone "el máximo reforzamiento de los dispositivos de seguridad" y de las capacidades de control y seguimiento de todos los organismos implicados. Tras los atentados de París, de noviembre del 2015, aunque el nivel en España no se elevó, sí se decidió reforzar la seguridad en diversos ámbitos dentro del mismo nivel 4, intensificando la vigilancia en los puntos que las fuerzas de seguridad identifican como más vulnerables o de gran afluencia de público, informa Europa Press.