El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha dejado en libertad al concejal de la CUP en Vic Joan Coma, imputado por un delito de incitación a la sedición. El magistrado le advierte en su resolución de que deberá comparecer en el Juzgado tantas veces como sea llamado, si no quiere que adopte una medida más gravosa que la retirada de pasaporte acordada este martes. Al salir, el edil anunció que "seguirá aplicando su lógica de desobediencia hasta conseguir el derecho de autodeterminación" de Cataluña.

La fiscalía no había pedido ninguna medida cautelar para él, a excepción de la retirada del pasaporte, por lo que sólo era cuestión de tiempo que Coma abandonara la Audiencia. Ante los medios, el concejal ha dicho que se trata de "una situación de injusticia antidemocrática flagrante de otra época, por parte de gente que no ha cambiado, no ya de siglo, sino de etapa", y que no afecta "solo a si el pueblo catalán decide o no decide su futuro, va a hacer o no un referendum pactado o no pactado, va de que todos los pueblos de España, que deben movilizarse de una vez por todas para terminar con la actual regresión antidemocrática que está viviendo el Estado español, que ya no hizo un transición correcta y ahora lo que hace es ir para atrás". Eso incumbe a "todas las personas que defiendan la libertad en el Estado español, no de si los independentistas quieren una cosa u otra".

Según Coma, recibido como un héroe por el medio centenar de personas de ERC y la CUP que se desplazaron a la Audiencia, cuando Cataluña tenga la independencia, él seguirá luchando por los de los Països Catalans. "¿Qué es eso de defender la unidad de España encerrando a un cargo electo en un juzgado durante horas? ¿Eso es lo que quiere el pueblo español? Yo creo que no, porque he hablado con mucha gente más allá del Ebro que no le gusta esta situación. Es inaceptable que se permitan situaciones así en el siglo XXI, en lo que se dice la Unión Europea democrática que no la he visto por aquí para defender a los cargos electos. No pararemos hasta conseguir la autodeterminación", aseveró.

Durante el interrogatorio, el fiscal Vicente González Motaquiso Coma que le explicara qué quiso decir cuando en el pleno pronunció las palabras: "Para hacer una tortilla hay que romper los huevos". Pretende así determinar el carácter violento o no de sus palabras. El concejal ha declarado ante el juez que cree en la desobediencia civil, y que no en los tribunales españoles ni europeos porque, a su juicio, estos no respetan los derechos fundamentales.

El auto del juez Moreno insiste en que el arresto de Coma sólo se ha producido por no acudir a la citación judicial y recuerda las manifestaciones del edil relativas a "no reconocer a los tribunales de Justicia cuando considere que no respetan los derechos políticos de los pueblos, así como no cumplir las leyes que considere injustas y que supongan un obstáculo a sus propuestas de separación de Cataluña del orden constitucional vigente".

CONCENTRACIÓN DE APOYO FRENTE A LA AUDIENCIA

El concejal estuvo arropado por senadores y diputados de ERC, PDECat y la CUP, y concejales de municipios catalanes que acudieron este miércoles a las puertas de la Audiencia Nacional para mostrar su apoyo al concejal de la CUP en Vic, detenido ayer por negarse a comparecer ante el magistrado el pasado 24 de octubre.

Entre el medio centenar de personas que se desplazó a la Audiencia estaban la alcaldesa de Vic, Anna Erra, que señaló que lo que se dice en los plenos debe enmarcarse en la libertad de expresión, y la diputada de la CUP Anna Gabriel, que cedió la palabra a Pere Freixa, de Capgirem Vic, quien aseguró que apoyar una moción "no puede ser objeto de delito" y que el arresto de Coma a instancias de una denuncia de "un partido fascista, de ultraderecha, da pie a pensar la complicidad existente entre los jueces y la extrema derecha", en referencia a la Plataforma Vigetana, de Josep Anglada.

El concejal anticapitalista está imputado por el llamamiento que hizo en un pleno municipal de desobedecer las resoluciones del Tribunal Constitucional sobre el proceso independentista. En aquel pleno se debatía una moción de apoyo a la proclamación del Parlament de inicio de la desconexión de Cataluña.

DELITOS FRANQUISTAS

Salellas denunció que en el auto por el que se le citó a declarar y no compareció se habla de delitos contra la forma de gobierno, que era cómo aparecían en el Código Penal de 1973, y ese es el texto legal "aplicado para privar de libertad a Coma", apostilló.

"El juez Moreno aplica la ley franquista para privarle de libertad, lo que demuestra el autoritarismo presente en la Audiencia Nacional y la conexión directa con el régimen jurídico de la dictadura presente en esta causa, que no es solo por la libertad de expresión, por los derechos democráticos mínimos para que un concejal pueda hablar en un pleno de lo que quiera, sino de la defensa del propio régimen democrático en su conjunto", afirmó el letrado.

Desde ERC, el senador Bernat Picornell, el diputado Joan Capdevilla y el vicesecretario de coordinación interna, Isaac Peraire, quisieron mostrar su apoyo a Coma acercándose a la Audiencia. El primero señaló que "el arresto es un paso más en la lucha del Estado para judicializar el 'procés'". Por su parte, Capdevilla señaló que ERC "siempre ha estado al lado de la democracia y la libertad de expresión" y anunció "la construcción en los próximos meses otra democracia y otro marco legal.

El exdiputado de la CUP David Fernández, por su parte, calificó de "abuso de poder" la detención de Coma. "El Estado tienen que explicar por qué violenta la vida de una persona, por qué lo van a buscar al ayuntamiento y lo llevan a un tribunal de excepción". En su opinión, que un representante de la soberanía popular tenga que dar explicaciones ante el juez es "propio de regímenes represivos y autoritarios y de un Estado neuróticamente obsesionado con la unidad de España" y destacó que la Audiencia nació "un día después de la muerte del Tribunal de Orden Público".

SEDICIÓN, SEGÚN EL FISCAL

La fiscalía considera que los pronunciamientos de Coma "en modo alguno pueden calificarse como espontáneos o individuales" y que cumplen con los requisitos del delito de sedición. Según el Código Penal, estos requisitos se concretan en que el autor de ese llamamiento sea "una persona constituida en autoridad", lo profiera de manera públca, que expresamente se llame a la desobediencia de resoluciones judiciales y que se les dé un alcance "más allá de las intenciones".

Coma ha manifestado en numerosas ocasiones que no reconoce la autoridad de los tribunales españoles y, tras negarse a comparecer ante el juez el 24 de octubre, pidió a los Mossos que no acataran si el magistrado ordenaba su detención. Una petición que ayer no fue atendida por la policía catalana, que le arrestó frente al Ayuntamiento de Vic y le entregó a la Guardia Civil para trasladarlo a Madrid.