La Agencia Tributaria ha llegado a la conclusión que el expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol Soley, dejó de pagar a Hacienda 885.651,45 euros por su fortuna oculta en Andorra. La Oficina Nacional para la Investigación del Fraude ha presentado en la Audiencia Nacional el «informe definitivo» sobre el exdirigente de CDC, en el que le atribuye un fraude fiscal, aunque precisa que está prescrito, pues data del ejercicio del 2000, y, por lo tanto, no tiene que hacer frente al pago de ninguna sanción.

Hacienda subraya que la investigación del caso Pujol ha acreditado la vinculación del exmandatario catalán con un depósito bancario en la Banca Reig de Andorra. En concreto, el identificado como AND 63810 que fue abierto el 21 de septiembre de 2000 y cancelado el 30 de diciembre de 2010. El contrato de apertura de esta cuenta está suscrito por su titular único, Jordi Pujol Ferrusola, el hijo del expresidente, que el mismo día realizó el único movimiento de abono: el ingreso en efectivo por importe de 307 millones de pesetas.

No obstante, señala el informe, consta una carta del 21 de septiembre del 2000 suscrita por Jordi Pujol Ferrusola en la que manifiesta que es titular de la cuenta, aunque con carácter fiduciario, no ostentando ningún derecho de propiedad sobre los bienes depositados, que le corresponde a su padre, Jordi Pujol Soley. Además, en un folio de «papel común» con el membrete del expresidente, este reconoce que es el propietario de esa cuenta y declara que en caso de defunción todo pase a su mujer, Marta Ferrusola.

La Agencia Tributaria incide que esta cuenta destaca a diferencia de las restantes en Andorra de Jordi Pujol Ferrusol que reflejan un continuo flujo de capitales de entrada y salida, con «procedencia de posiciones financieras» en varios países. La cuenta AND63810 solo presenta un abono por ingreso de 307.000 pesetas y «periódicas imposiciones a plazo fijo» que, a su vencimiento, son renivadas por otras.