El juez que investiga las cargas policiales en el referéndum unilateral del 1-0 interrogará a los 24 agentes antidisturbios imputados por su actuación “desproporcionada” de una sola tanda y durante las dos semanas del 12 al 23 de noviembre, según fuentes judiciales. Los policías que deberán comparecer en el juzgado, de los que cuatro son inspectores jefes, actuaron en ocho escuelas de Barcelona que fueron designados como centro de votación. De las 27 piezas separadas que integran la causa, al menos, 17 han sido archivadas, aunque el Ayuntamiento de Barcelona ha recurrido una docena.

En los autos de imputación, el titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Barcelona señala que los policías antidisturbios que actuaron en los diferentes operativos procedieron de forma no solo “desproporcionada, sino también “indiscriminada” o “peligrosa”. Para llegar a esta conclusión, el magistrado ha analizado decenas de fotografías y videos sobre la intervención de la Policía Nacional de los centros docentes FEDAC Horta-Caterina de Siena, Agora, Escoles Pies, Infant Jesús de Gràcia, Escola Mediterrànea, Pau Claris, Els Horts y Ramon Llull.

En el caso de la escuela Pau Claris, por ejemplo, el juez, que ha imputado a tres policías, concluye que “no puede apreciarse la proporcionalidad exigida en el actuar de algunos agentes, que efectuaron actuaciones que, si bien van dirigidas siempre a desalojar del lugar, en determinados momentos son claramente desproporcionadas o incluso peligrosas”.

Uno de los policías imputados es el que, según el instructor, aparece en uno de los vídeos estirando de la mano y arrastrando por una escalera a Marta T., la activista que denunció tocamientos y lesiones por parte de la policía. En la grabación se puede observar también como una manifestante recibe un golpe en la cabeza, como un policía le da una patada en la pierna a otra persona y como otro agente zarandea “fuertemente” a una mujer “sin motivo claro incialmente”.