El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, instructor del caso Tándem en el que se investigan las actividades presuntamente delictivas del comisario jubilado José Manuel Villarejo, acordó ayer retirar al vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Podemos, Pablo Iglesias, su condición de perjudicado en la pieza separada Dina. En ella se investiga el robo del móvil de su exasesora Dina Bousselham y el uso posterior de sus datos.

Esta decisión del Juzgado Central de Instrucción número 6 llega después de que la fiscalía anticorrupción lo pidiera la semana pasada, días después de la declaración de la que fuera asesora de los morados. En esta pieza número 10 de Tándem se investiga el destino del contenido del teléfono móvil que le fue sustraído a Bousselham y que pasó por manos, entre otros, del comisario jubilado ahora en prisión.

Según dijo Bousselham al juez, Pablo Iglesias le devolvió la tarjeta de su móvil después de que el contenido de la misma fuera publicado, esto es, en el verano del 2016, a pesar de que el propio secretario general de Podemos declaró ante el magistrado que el presidente del Grupo Zeta, Antonio Asensio, se la había entregado en enero de ese año. Esta versión fue corroborada por el propio Asensio.

La propia Bousselham afirmó el 18 de mayo en sede judicial que cuando Iglesias en junio o julio le dio la tarjeta MicroSD que le había sido sustraída, estaba dañada físicamente y no pudo recuperar los datos. Afirmó que incluso mandó la tarjeta a una empresa especializada en recuperación de datos en Alemania, pero ni así fue posible.

«En este momento dicha condición resulta insostenible toda vez que las diligencias practicadas no han permitido concretar en qué medida resulta ofendido o perjudicado, pero además, las contradicciones desgranadas exigen un esfuerzo investigador que resulta incompatible con la posición procesal pretendida», subraya el auto.