Risueño, de buen humor y recordando varias veces la excepcional de tener que hacer una rueda de prensa desde la cárcel, Oriol Junqueras compartió con la prensa y por videoconferencia más de 70 minutos. Múltiples mensajes y, como es norma personal del republicano, ni un solo ataque a ninguna fuerza. Pero, al mismo tiempo, Junqueras hizo una clara apelación al voto útil dentro del independentismo cara a los comicios del 28-A.

Nunca un partido independentista ha ganado unas elecciones generales en Catalunya. Y si ello no ha pasado nunca, como nunca la suma de fuerzas independentistas ha superado el 50% será porque no es fácil, aseveró Junqueras desde el Centro Penitenciario Madrid V. Por tanto, pidió a todo el mundo soberanista que vaya a votar y que no elija otras opciones porque la mejor, sin duda, es la de ERC sentenció.

Y es la mejor porque cuanto mayor sea la victoria de ERC más nos acerca a un referéndum y a la independencia, prosiguió antes de atrevirse a citar a , nada menos, al que fuera seleccionador español de futbol Luis Aragonés. Porque la victoria que desea Junqueras no se circunscribe a estas generales, sino que alcanza a cualquier convocatoria que venga, como la doble del mes próximo. Nuestro objetivo es ganar y ganar y ganar y ganar. Queremos ganar para ser útiles.

Y es que la reiteración y la dimensión de la victoria (cualquier entrenador prefiere ganar por 10 a 0 que por 1 a 0) se antoja clave a Junqueras para doblegar la inflexible posición del presidente del gobierno de circunscribir el diálogo con el secesionismo a los márgenes que delimita la Constitución.

No se mostró, por tanto, sorprendido el presidente de ERC de ese nunca, nunca, nuca que lanzó el socialista el jueves en Badalona. Para Junqueras, el punto en el camino que separa a Sánchez de ERC lo delimitirásn el resultado en las urnas. Si consiguiésemos los 48 diputados en juego en Catalunya el 28-A, hiperbolizó, estaríamos cerca del referéndum de lo que estaríamos si no obtuviésemos ninguno, afirmó.

Eso sí, en plena comunión con el número 2 de ERC en los comicios, y candidato efectivo, Gabriel Rufián, Juqueras no dejó lugar a dudas sobre su posición ante la llegada de un eventual tripartito de diestras.

Cualquier demócrata europeu tiene la obligación de impedir la creación de gobiernos de extrema derecha señaló. Eso no significa que vayamos a regalar nuestros votos a Pedro Sánchez. No trazaremos líneas rojas que supongan un cheque en blanco para la extrema derecha, pero al mismo tiempo no daremos cheques en blanco a Sánchez que suponga una línea roja a nuestras legítimas aspiraciones de conseguir una repuública independiente, aseveró a modo, casi, de trabalenguas. Seremos exigentes con nuestras demandas, sentenció.

Como siempre en el caso de Junqueras, a veces cabe más subrayar lo que no dice que lo que asevera. Por ejemplo, sobre la relación con la posconvergencia. A la pregunta directa, la respuesta cortés. Incluso si se le pide un saludo para Carles Puigdemont, el republicano le lanza uno fraternal, de compañeros. Y un agradecimiento a todos aquellos que se hallan en el exilio. Otra cosa son sus afirmaciones en su discurso, como cuando destacó la continuidad histórica de su partido. Somos de largo el partido más perseguido y más represaliado. Y el que ha luchado como el que más contra el fascismo, desde los tiempos de Francesc Macià y Lluís Companys. Y los que más años llevamos defendiendo la independencia. También desde la cárcel y aunque nos pidan 25 años de cárcel. Como diciendo.