¿Dónde viven los diputados? ¿Tienen todos un chalet con piscina o viven en un piso en la ciudad? ¿Están hipotecados hasta la jubilación o ya tienen su casa pagada? ¿Alquiler o compra?
Algunas de estas preguntas pueden consultarse libremente en la página web del Congreso en las declaraciones de bienes que cada diputado tiene obligación de presentar a la Cámara al inicio de la legislatura y de actualizar cada vez que hay cambios de relevancia.
Ha sido el caso del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y de su pareja, la portavoz parlamentaria, Irene Montero.
Hace pocos días, ambos actualizaban su declaraciones de bienes e ingresos con ese chalet de algo más de 600.000 euros que han adquirido a medias en la sierra de Madrid gracias a una hipoteca de 540.000 euros a pagar en 30 años.
Iglesias ya tenía una vivienda rústica en la provincia de Ávila valorada en su día en algo más de 13.000 euros.
Mientras Iglesias entra en el club de los propietarios hipotecados, su compañero de partido y hasta hace un año 'número dos' de Podemos, Íñigo Errejón, continúa de alquiler, aunque declara una desahogada situación financiera con cuentas bancarias por valor de 72.000 euros.
Quien no tiene cuentas en los bancos es el también diputado de Podemos Diego Cañamero.
De forma expresa declara que no es titular de ninguna cuenta bancaria y que solo figura como autorizado en una cuenta de su mujer, donde percibe 426 euros mensuales de ayuda familiar del Sistema Especial Agrario.
Cañamero sí tiene casa en propiedad en la provincia de Sevilla, aunque no consta el valor de la vivienda.
Más allá de Podemos y entre los líderes políticos nacionales, Mariano Rajoy posee un total de cinco inmuebles.
El presidente del Gobierno tiene, además de su vivienda habitual en Madrid, que compró en régimen de gananciales, un apartamento con plaza de garaje y una oficina en Pontevedra y otro apartamento en Madrid. A esos tres inmuebles se suma el 25 por ciento de un apartamento en Gran Canaria, comprado también en gananciales.
Por arrendamientos de bienes inmuebles, Rajoy declara unos ingresos de 19.446 euros anuales.
De alquiler vive en Almería donde es diputado el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, aunque también declara una vivienda de 128 metros cuadrados en Madrid y el 10 por ciento de otro inmueble en Guadalajara procedente de una herencia.
Entre los expresidentes del Congreso que siguen siendo diputados, Jesús Posada tiene una vivienda habitual, otra de verano, locales comerciales y prados en Soria, todos heredados, así como una finca en Ciudad Real, también procedente de una herencia.
Declara ingresos de más de 22.000 euros por el alquiler de la finca rústica y de los locales comerciales.
El socialista Patxi López posee una vivienda en Vizcaya y un piso en Cantabria, ambos en régimen de ganancial.
Su jefe de filas, Pedro Sánchez, declara una vivienda y el 50 por ciento de otra, así como un garaje y la mitad de otro.
En la declaración de bienes que figura en la web del PSOE, Sánchez está pendiente de amortizar 104.434 euros de un préstamo hipotecario de Bankia, que esta entidad le concedió en 2008 por un importe total de 159.300 euros.
Como Rajoy, tiene también ingresos por alquileres, que cifra en 13.711 euros anuales.
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, posee el 50 por ciento de dos viviendas con garaje en Barcelona y que todavía está pagando.
Tiene dos hipotecas, una de 306.000 euros de los que aún debe 254.800, y una segunda de 165.500, a la que le restan 107.000 euros por pagar.
Además de las dos viviendas en Barcelona, Rivera vive de alquiler en una casa unifamiliar en Pozuelo de Alarcón, el mismo municipio en el que vive Pedro Sánchez.
El portavoz de Cs en el Congreso, Juan Carlos Girauta, es otro de los que no declaran una vivienda en propiedad, lo mismo que le ocurre al secretario general del grupo, Miguel Gutiérrez.
Girauta no tiene hipotecas pero sí dos préstamos personales por los que adeuda cerca de 113.000 euros.
Siguiendo con los portavoces, Joan Tardà, de ERC, posee el 50 por ciento de dos viviendas y una plaza de garaje en Cornellà de Llobregat y carece de deudas, aunque sí cuentas bancarias con 189.773 euros y un plan de pensiones con 117.469 euros.
Gabriel Rufián, que antes de ser diputado declara haber sido despedido de su empleo y cobró del FOGASA, tiene una vivienda al 50 por ciento en Sabadell (Barcelona) con una hipoteca de 178.000 euros, de los que ha pagado menos de 10.000.
El también diputado independentista Carles Campuzano, del PDeCAT, declara un inmueble y un aparcamiento, ambos en Barcelona y una hipoteca a tipo variable con un saldo pendiente de 71.058 euros.
Aitor Esteban, del PNV, tiene el 50 por ciento de una vivienda en Vizcaya y una finca de árboles en esa provincia, además de una vivienda y un corral en Soria. Suma además tres préstamos personales por algo menos de 20.000 euros.
Por último, la portavoz de Bildu, Marian Beitialarrangoitia, tiene tres inmuebles en Guipúzcoa, una vivienda, un garaje y un trastero y le restan 24.536 euros de hipoteca, bastante menos que los 540.000 que deben Pablo Iglesias e Irene Montero desde este mes de mayo
