La revista TIEMPO publica esta semana un estremecedor reportaje sobre las posibilidades que tiene un recién nacido de sobrevivir en el continente africano. Acompañado de espectaculares fotos, los periodistas José Luis Toledano y Ana Palacios recorren diversos lugares para demostrar que, lamentablemente, las enfermedades que en Europa ya están superadas en África siguen impidiendo el sano desarrollo de los bebés.
Se calcula que cinco millones de niños mueren en África cada año antes de cumplir los cinco años de edad, con frecuencia debido a enfermedades tratables y perfectamente curables en otros lugares del mundo. En general, la mayoría de las mujeres africanas llegan solas al hospital, dan a luz y, apenas unas horas después, regresan a sus hogares sin un mínimo seguimiento médico.
Cada mujer africana tiene un promedio de cinco hijos, aunque en Níger y Mali la media es de siete. La desnutrición es otra de las principales causas de mortalidad infantil. Afecta a más de 20 millones en todo el mundo y causa un millón de muertes anuales. Solo en 2015 más de 250.000 niños fallecieron por esta razón en África. Además, una dieta deficiente provoca discapacidad física y mental en muchos menores.
La desnutrición no es solo el resultado de la escasez de comida sino una más de las consecuencias de la pobreza permanente. La espiral de la miseria es responsable de enfermedades constantes, de la escasez de agua potable y la falta de acceso a servicios de salud y de saneamiento aceptables.
Paul Preston: “Los referendos son instrumentos de las dictaduras”
El historiador británico Paul Preston carga duramente contra el Brexit en una entrevista publicada esta semana por la revista TIEMPO. Días después de que sus compatriotas votasen a favor de la salida del Reino Unido de la Unión Europea, Preston afirma en el semanario español que “los referendos son instrumentos de las dictaduras”, y recuerda que Hitler o Franco también los celebraban.
Según Preston, la victoria de los contrarios a la UE se ha producido “a base de mentiras y manipulación”. Y sobre las razones profundas del resultado afirma que los británicos “mantienen una única memoria histórica, pero está distorsionada”. En este sentido, el hispanista asegura que “el ciudadano tiene una idea distorsionada sobre la historia”, por ejemplo al creer que el Reino Unido ganó en solitario y sin la ayuda de Estados Unidos la Segunda Guerra Mundial.
