Horas después de que el rey Felipe VI usara su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas para apelar a los partidos políticos de España a superar “diferencias” a través del “diálogo, el compromiso, el sentido del deber y la solidaridad”, el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manual García Margallo, ha preferido esgrimir la amenaza de “un movimiento secesionista en Cataluña que avanza a toda máquina” para interpelar a un acuerdo.

“La historia dice en esto, y lo contaba [Francesc] Cambó en 1927, que una secesión en Cataluña solo podrá tener éxito si España está interna en dificultades internas o envuelta en un conflicto exterior y en estos momentos un Gobierno en funciones es, por definición, más débil, menos capaz de afrontar esa situación que un gobierno con plenas competencias”, ha dicho Margallo en los pasillos de la ONU, donde ha comparado la situación con “salir a boxear con una mano atada a la espalda, algo que no aconsejaría a ningún púgil”.

Aunque el Rey no hizo referencia a ningún partido en concreto al hablar de la “coyuntura compleja”, el ministro en funciones sí ha puesto el peso de la responsabilidad sobre el PSOE. “Nosotros (el PP) hemos firmado 150 medidas con Ciudadanos, 100 de las cuales estaban en el pacto que el PSOE hizo con Ciudadanos y hemos dicho que esas 150 medidas forman parte de un cuadro abierto.

Si el PSOE no coincide en el diagnóstico que lleva a votar esas medidas o no coincide con esas medidas sería bueno que se sentase y dijese cuál es la parte del diagnóstico en la que no coincide, qué medidas no le gustan, qué habría que derogar, qué medidas le gustaría añadir o cuáles querría modificar”, ha dicho. “Eso es lo que se hace en los países sensatos”.

“LEÑA AL FUEGO” DE UNA EUROPA CONVULSA

Margallo, que ha dicho que la situación en España ha sido “uno de los temas principales” en sus encuentros con representantes de otros países durante la Asamblea General de la ONU, ha definido esa situación como una “absolutamente grotesca, sin precedentes en Europa”. Y ha usado precisamente el “panorama muy convulso en Europa en estos momentos” para argumentar que “que haya incertidumbre en España añade leña al fuego”.

“No está la magdalena para tafetanes para que nosotros añadamos ahora más incertidumbre”, ha declarado tras mencionar las dificultades por las que atraviesa el Partido Socialista en Francia, la situación de inestabilidad en Irlanda, el referendum que celebrará Italia y las lecciones presidenciales “muy complejas” que se avecinan en Austria, así como el Brexit.

“Si saliésemos de la incertidumbre podríamos ser un país ancla en la Unión Europea en un momento en que hay que tomar decisiones”, ha dicho Margallo, mencionando entre otras “qué se hace con el Reino Unido y cómo refundamos la UE para que esto no se interprete como el principio del fin sino como una oportunidad hacia adelante”.