Artur Mas se ratifica en que la financiación de Convergència no fue ilegal y no hubo corrupción. En una breve declaración de un minuto y medio, el 'expresident' ha mostrado este jueves en L'Hospitalet su total apoyo en el extesorero del partido, Daniel Osácar, a quien Félix Millet y Jordi Montull acusan, en el juicio del saqueo del Palau de la Música, de ser la persona que vehiculó la financiación ilegal de Convergència a través del Palau, cobrando comisiones de Ferrovial a cambio de la concesión de obra pública a la empresa.

"Me ratifico en todo lo que había dicho hasta ahora: primero, la plena confianza en Daniel Osácar, absoluta, total, y segundo, lo que ha explicado él es que muchas de las cosas que se dijeron el primer día [del juicio] eran simplemente mentira", ha afirmado el 'expresident' y actual presidente del PDECat. En este sentido ha añadido que la versión de hoy de Osácar en el juicio del caso Palau (desmintiendo lo dicho ayer por Millet y Montull) ha sido "una versión muy clara, muy rotunda, y creo que además muy honesta en el sentido de que muchas de las acusaciones que se le hacen son pura invención o pura mentira". Daniel Osácar, ha aseverado al inicio de su intervención, es "la persona que tiene nuestra confianza a nivel de partido durante todos estos últimos años".

"UNA MANERA DE PROTEGERSE"

Mas ha añadido que las declaraciones de Millet y Montull acusando a Convergència son "una manera de alguna gente de protegerse, que necesitan rebajar sus penas porque es manifiesto que estuvieron robando dinero del Palau de la Música".

Dicho lo cual, el 'expresident' ha dado por finalizada su declaración, de a penas un minuto y medio, sobre la acusación directa de financiación ilegal de Convergència. "Os he dicho lo que os tenía que decir", ha añadido simplemente ante una nube de medios de comunicación.

En tanto, el cerco político alrededor del 'expresident' se redobla hasta conseguir una unidad casi perfecta en el Parlament. Todos los grupos de la Cámara, menos Junts pel Sí, óbviamente, han presentado una petición conjunta para que el ‘expresident’ Artur Mas, presidente a su vez del PDECat y, en tiempos, de CDC, comparezca ante la Cámara. El motivo de la unidad y de la urgencia, claro está, las revelaciones de Fèlix Millet.

La iniciativa, ni que sea por razones cronológicas, cabe adjudicársela a la CUP y a Ciutadans que el mismo miércoles ya comunicaron su intención de pedir la presencia de Mas en el Parlament. Los ‘ciudadanos’ añadieron a la lista al actual ‘president, Carles Puigdemont, con el fin de conocer qué medidas ha tomado su Ejecutivo para que no se reproduzcan las presuntas prácticas denunciadas por Millet, y este jueves por Jordi Montull.La CUP, por su parte, reclamó el miércoles que además de Mas fueraGerma Gordó, hoy diputado de JxSí, el que diera explicaciones

Y los anti-capitalistas, los mismos que, dijeron, habían enviado a Mas " a la papelera de la historia" parecen decididos a no dar tregua al líder del PDECat. Así, la fuerza ha registrado este jueves una serie de preguntas para indagar sobre su actividad actual.

LOS VIAJES DE MAS

Los 'cupaires' quieren conocer los detalles del informe anual de actividades de su oficina y también descubrir los motivos por los que se usa el correo corporativo de la Conselleria de Presidència de la Generalitat para informar de convocatorias y enviar notas de prensa de actos públicos en los que participa el 'expresident'.

En este sentido, exigen que Mas explique la relación de su actividad con programas de internacionalización de la situación política catalana y analizar con lupa las aseveraciones que expone sobre el proceso soberanista en el exterior. Quieren saber especialmente quién gestiona la cobertura comunicativa de sus viajes en universidades como Oxford (Reino Unido) y Harvard EEUU), donde recaló la semana pasada.