El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata va a solicitar la extradición desde EEUU de los 10 individuos que asaltaron la embajada de Corea del Norte el pasado 22 de febrero, según informa la agencia Reuters citando fuentes judiciales. Según consta en la investigación, cuyo secreto acordó ayer el juez levantar, un ciudadano mexicano, residente en Estados Unidos, Adrián Hong Chang, lideró el grupo de asaltantes y avisó de su acción al FBI en Nueva York con el objeto de facilitar el material audiovisual que supuestamente había obtenido.

El relato de los hechos que recoge la causa abierta apunta a la comisión de delitos de allanamiento de morada, detenciones ilegales, lesiones, falsificación documental, amenazas y robo, cometidos por organización criminal.

Tras el asalto, en el que también han sido identificados como responsables el ciudadano estadounidense Sam Ryu y el surcoreano Woo Ran Lee, Hong Chang se desplazó a Lisboa, donde cogió un vuelo que llegó a New Jersey el 23 de febrero, y cuatro días después se trasladó a Nueva York y contactó con el FBI.

El supuesto líder del asalto, según explica el juez, se presentó en la embajada a las 16.34 horas del 22 de febrero y pidió ver al encargado de negocios, al que ya conocía de una visita previa en la que se hizo pasar por empresario. Aprovechando un descuido, dejó pasar al resto del grupo que se encontraba en el exterior y portando machetes, cuchillos, barras de hierro y armas cortas simuladas, «comenzaron a golpear violentamente a sus ocupantes, hasta que consiguieron reducirlos y colocarles grilletes y bridas para inmovilizarlos».

Una de las personas retenidas pudo saltar y escapar por una de las salidas, donde fue vista por un ciudadano que solicitó asistencia sanitaria y policial. Al llegar la Policía, los agentes llamaron a la puerta y les abrió el propio Hong Chang, que les indicó que no había ningún problema y que debían comunicarlo oficialmente al Consulado.