El primer ministro belga, Charles Michel, ha afirmado hoy que el expresidente cesado de la Generalitat Carles Puigdemont es un "ciudadano europeo que debe responder de sus actos, con derechos y obligaciones, sin privilegios, ni más ni menos, a quien guste y no guste".

"Esto quiere decir que el Gobierno belga trata con el respeto del Estado de Derecho la situación de todos los ciudadanos europeos", ha añadido Michel ante los diputados de la Comisión de Interior del Parlamento Federal, en un debate centrado en la situación en Cataluña.