El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha señalado hoy que los gobiernos autonómicos y, especialmente, los formados por más de un partido, no pueden estar lamentándose "todo el día".

Durante la rueda de prensa en la que ha dado cuenta de los datos del déficit público de 2015, ha insistido en que gobernar consiste también en elegir cómo se puede emplear el dinero público y en cambiar prioridades.

Ha señalado que con los presidentes que se reúne le indican que tienen que hacer determinadas inversiones porque se las pide "su socio" en el Ejecutivo y lo que "hay que hacer es racionalizar las prioridades".

El ministro se ha dirigido a los periodistas, con lo que ha coincidido en que tras esas entrevistas todos los presidentes siempre se comprometen a cumplir con los objetivos previstos, lo que en muchas ocasiones no hacen.

Ha reconocido que si las comunidades autónomas han doblado el objetivo de déficit se debe en gran parte a que el año pasado ha sido electoral y al retraso para formarse los gobiernos, lo que también ha retrasado la presentación de los planes económico-financieros necesarios y, en varios casos, la aprobación de los presupuestos regionales.

Montoro ha dicho que la no disponibilidad de créditos no tiene por qué implicar recortes, sino la priorización en el gasto y las inversiones de las comunidades.

"No se pide la congelación de los gastos -ha continuado-, sino que haya un techo de gasto", que puede crecer "como máximo" el 1,8 por ciento del PIB, como prevé la ley de estabilidad presupuestaria.

Ha dicho que espera que con esas medidas no sea necesaria la intervención de las cuentas de ninguna autonomía y ha recordado que además el Gobierno está en funciones, al tiempo que ha confiado en que no haya que tomar una decisión de ese estilo.