Nadie sabe a ciencia cierta si el PP volverá a tener una cita con las urnas en Navidad, pero lo que sí tienen ya marcado en rojo algunos dirigentes o exdirigentes populares son los días que deberán pasar por el juzgado. La propia fuerza conservadora está acusada también como partícipe a título lucrativo en varias causas que han sobresalido entre la actualidad judicial de los últimos años y que desde finales de este mes empezarán a resolverse. El partido de Mariano Rajoy se verá sometido a un otoño caliente en pleno embrollo por la investidura. Más adelante le tocará el turno al PSOE con el 'caso ERE'.

LAS TARJETAS OPACAS

Las elecciones vascas, que podrían ser clave para desencallar el bloqueo político en el Congreso si el PNV requiriese de los populares o los socialistas para formar gobierno, se celebrarán el 25 de septiembre. Dos días antes empezará el desfile por los tribunales de cargos y excargos del PP, también del PSOE e IU.

Rodrigo Rato, ministro en la época de José María Aznar, inaugurará junto con Miguel Blesa la vista de la Audiencia Nacional por el caso de las tarjetas opacas de Caja Madrid (despuésBankia), entidad que ambos presidieron. Anticorrupción pide cuatro años de cárcel para Rato y seis y medio para Blesa en un juicio con 66 procesados. La fiscalía opina que se apropiaron indebidamente del patrimonio de Caja Madrid con un sistema opaco que les permitía usar a su antojo las tarjetas de Caja Madrid sin declararlo a Hacienda.

LA GRAN MADEJA DE LA 'TRAMA GÜRTEL'

Este otoño Rato saldrá en las noticias tanto o más que cuando dirigía el FMI. El "autor del milagro español", según lo bautizaron en su partido, también está imputado en el supuesto fraude de la salida a bolsa de Bankia -la madre del cordero de los tejemanejes en la entidad-, cuya instrucción está previsto que acabe a finales de año. Antes, este jueves, el exministro declarará como investigado por la contratación como asesor externo en Bankia de su excuñado, Santiago Alarcó. Entre medias, comparecerá como testigo en la que es junto con la de los ERE la trama estrella del presente lustro: la Gürtel.

Este caso, un compendio de todas las figuras delictivas relacionadas con la corrupción (prevaricación, malversación, apropiación indebida, comisiones ilegales...), tendrá al mismo PP de acusado como partícipe a título lucrativo de los negocios acometidos por la red de Francisco Correa (para quien el fiscal pide 125 años). Siete años después de que saltara la espoleta, la primera fase del juicio, con 39 acusados, empezará el 4 de octubre y concluirá a mediados de diciembre, a las puertas de unas hipotéticas elecciones.

Además de Rato, declararán entre los 400 testigos Ángel Acebes, Francisco Álvarez Cascos, Jaime Mayor Oreja, Javier Arenas y Esperanza Aguirre. Ana Mato, exministra de Sanidad con Rajoy, lo hará por unos 28.500 euros como partícipe a título lucrativo por los supuestos delitos de su exmarido, Jesús Sepúlveda, cuando era alcalde de Pozuelo de Alarcón. Miembros del Gobierno de Aguirre en la Comunidad de Madrid, como Carlos Clemente o Alberto López Viejo, también representarán las siglas populares en el juicio, en el que el extesorero Luis Bárcenas será (el fiscal pide 42 años de prisión para él) uno de los grandes protagonistas. Sus predecesores Álvaro Lapuerta y Ángel Sanchís también se sentarán en el banquillo.

[Un buen puñado de ministros del PP en la época de José María Aznar pasarán este otoño por los juzgados. No será el caso de Miguel Arias Cañete (4), aunque su nombre ha salido salpicado en el ‘caso Acuamed’. Sí declararán como testigos en el juicio de la ‘Gürtel’ Jaime Mayor Oreja (5), Francisco Álvarez Cascos (6), Rodrigo Rato (8) -imputado en otras causas-, Ángel Acebes (9) y Javier Arenas (2). Además de Rato, comparecerán como acusados el extesorero Luis Bárcenas (1), el exconsejero madrileño Alberto López Viejo (3), ambos por la ‘Gürtel’, y el expresidente balear Jaume Matas (7), por el ‘caso Nóos’]

LA PROFUNDA HUELLA DEL 'CASO BÁRCENAS'

La 'Gürtel' ha acabado con más ramas que un abeto. Una de sus derivadas, la de los contratos con Fitur del Gobierno de Francisco Camps -la trama valenciana merecería un capítulo aparte- podría encajar la primera sentencia en los próximos meses. Otro caso, el del aluvión de los papeles de Bárcenas y la consiguiente presunta financiación irregular del PP (con supuestas donaciones ilegales por valor de ocho millones de euros entre 1990 y el 2008) aún está por llegar, pero en las próximas semanas se prevén novedades en uno de sus esquejes: el borrado de los ordenadores del extesorero conservador.

La jueza Rosa Freire ha procesado al partido al considerar que destruyó las computadoras para ocultar pruebas de la supuesta caja b de los populares. El auto de la magistrada ha sido recurrido por el partido y la fiscalía y en breve se verá la resolución, pero en todo caso, por ahora aparecen señalados tanto el PP como persona jurídica como la actual tesorera, Carmen Navarro, el abogado Alberto Durán y el informático que formateó los discos hasta 35 veces antes de rayarlos.

LA 'PÚNICA', RITA BARBERÁ, EL 'CASO NÓOS'

Más migrañas para un Rajoy al que Ciudadanos vuelve a mirar de reojo tras el caso de José Manuel Soria por mucho que este haya renunciado al Banco Mundial. El 'caso Acuamed' (que salpica al Ministerio de Agricultura y al exministro Miguel Arias Cañete) y las investigaciones a los exdiputados Pedro Gómez de la Serna, Gustavo de Arístegui y Vicente Martínez Pujalte aún están en ciernes, pero la instrucción del 'caso Púnica', que afecta al PP madrileño y motivó la dimisión de Aguirre, se cerrará este otoño. El exconsejero Francisco Granados, uno de los supuestos cabecillas, ha sido citado por el juez para el 5 de octubre con el fin de decidir si prorroga dos años más la prisión condicional.

Otros nombres propios que volverán a la palestra serán los de Rita Barberá y Jaume Matas. En el marco del 'caso Taula', que se encuentra aún en los inicios de la investigación al PP de València, el Tribunal Supremo podría decidir en las próximas semanas si finalmente imputa a la alcaldesa y actual senadora. En cuanto al expresidente balear, que compite con Rato en citaciones judiciales (y le gana), conocerá en diciembre la sentencia por el 'caso Nóos', en el que está acusado (el fiscal pide cinco años de prisión) de delitos relacionados con los contratos que el Ejecutivo de la isla formalizó con el instituto que comandaba Iñaki Urdangarin.

«A los jueces nos duele escuchar que la justicia no es independiente, que está politizada, que son los partidos los que dirigen nuestra acción», lamentó ayer el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes. La "rabiosa independencia" judicial también estará bajo los focos.