El Gobierno ha vuelto a plantar al Congreso. Después del ministro de Defensa, Pedro Morenés, este martes ha sido la titular de Fomento, Ana Pastor, quien ha eludido su cita con la comisión del ramo, a la que estaba convocada junto con otros altos cargos de su departamento.

El presidente de la Comisión de Fomento, Sergio Pascual, ha anunciado que preguntará al presidente del Congreso, Patxi López, qué medidas legales se pueden adoptar ante este nuevo plante.

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La ministra estaba citada a comparecer por varios asuntos este martes, lo mismo que el presidente del administrador de infraestructuras ferroviarias ADIF, Gonzalo Ferre; el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Julio Gómez-Pomar; y la directora general de Operaciones de Renfe, Berta Barrero.

Sin embargo, ninguno de los cuatro se ha presentado a la cita, lo que ha motivado las quejas de todos los grupos de la oposición y las justificaciones del PP, que continúa alegando que un gobierno en funciones no puede someterse al control político de una Cámara que no lo ha elegido.

Al término de la sesión, el presidente de la Comisión de Fomento, el diputado de Podemos Sergio Pascual, ha indicado que ante estos acontecimientos "de extrema gravedad" pedirá a López que "evalúe con los servicios jurídicos qué actuaciones hay que llevar a cabo para responder a este desplante".

¿HAY ALGO QUE OCULTAR?

Posteriormente, en declaraciones a los medios, el presidente de la Comisión ha recordado que "los ciudadanos no están en funciones" y ha insinuado que este "nuevo desplante" puede incluso "sembrar la sospecha de que hay cosas que ocultar" en el ministerio. Además, ha recordado que el 'plante' de los dirigentes de Adif y Renfe es "doblemente grave" porque no están en funciones. "Es un desplante inédito, alguien tendrá que responder por él", ha zanjado.

También el portavoz socialista de Fomento, Juan Luis Gordo, cree que la Cámara debe "pedir responsabilidades" al Gobierno por el 'plante' de la ministra, que a su juicio supone un "quebranto del juramento" del cargo y también contraviene la Constitución y la Ley del Gobierno.

"No deja de sorprender que mientras la ministra, durante todo el 2016, viene haciendo visitas y actos de clara precampaña electoral, e incluso presenta el balance de la legislatura ante los medios, desprecie a los representantes de los españoles y se niegue a venir hoy a dar cuenta de su gestión política. No lo entendemos", ha añadido.

Por parte de Ciudadanos, Fernando Navarro ha tachado de "absoluta falta de respeto" a los diputados y a los ciudadanos que los altos cargos citados no hayan aparecido, y ha insistido en que muchos de los asuntos sobre los que estaban llamados a comparecer serán "recurrentes" a lo largo de la legislatura.

ACTUACIÓN "CIRCENSE"

Frente a todas estas acusaciones, el portavoz popular de Fomento,Andrés Ayala, ha afirmado que la sesión de la Comisión ha sido "un error" y que "no se tenía que haber celebrado" porque "es de sentido común" que un gobierno en funciones no puede ser controlado, tal y como constata un informe del Ministerio de la Presidencia al que el Ejecutivo alude en el texto enviado al Congreso para excusar la presencia de la ministra.

Según dicho texto, al que ha tenido acceso Europa Press, el Gobierno recuerda que su criterio es que "la Cámara no puede someter al gobierno en funciones y sus altos cargos a iniciativas de control en la medida en que no existe relación de confianza entre un gobierno en funciones y el Congreso", tal y como "avala" el informe remitido el pasado 10 de marzo a la Cámara.

Posteriormente, en declaraciones a los medios, ha calificado la situación de "circense" y ha instado a Pascual a dimitir por actuar más con fines políticos que institucionales, insistiendo en que no ha habido "quebranto ni incumplimiento" de las obligaciones del gobierno y que la comparecencia sí habría sido "absolutamente ilegal".