La decisión de Pablo Iglesias de destituir a su número tres, Sergio Pascual, supone que el secretario general redobla el poder que tiene en el partido y socava la influencia de Íñigo Errejón, con quien se enfrenta en una pugna interna por imponer la hegemonía en Podemos. Pascual ha sido desde el principio el brazo derecho de Errejón y hasta este martes, cuando el líder morado decide fulminarlo, una de las personas con mayor autoridad.
Iglesias aduce que ha perdido la confianza en él, le responsabiliza de la crisis interna, y asume todas las competencias que hasta ahora venía desarrollando el diputado de Sevilla. A la práctica, esta determinación implica que Iglesias se queda con una de las áreas de mayor peso, que ostentaban los errejonistas, la de la secretaría de organización y toma el control de un partido que queda al borde de la fractura en un momento de máxima dificultad, cuando trata de retomar las negociaciones con el PSOE para llegar a un acuerdo de gobierno.
En principio, la intención es que el departamento que estaba en manos de Pascual pase a Iglesias sólo de forma provisional y que se nombre a un nuevo responsable. Sin embargo, la potestad de elegir al nuevo secretario de organización la tiene el líder y la jefa de gabinete de Iglesias, Irene Montero, ha recordado este miércoles que "la ejecutiva es un equipo de apoyo a la secretaría general".Pascual queda fuera de ese órgano de coordinación y mantendrá sólo su acta de diputado en el Congreso.
Iglesias anunció este martes a los suyos, a través de un mensaje de Telegram, que dará más explicaciones de los motivos que le han llevado a tomar esta decisión en la próxima reunión del consejo ciudadano estatal, el órgano de dirección del partido, donde están representados ambas facciones. Ese encuentro todavía no tiene fecha, pero según los estatutos no puede demorarse más del 3 de abril,puesto que el último se realizó el 3 de enero y está establecido que, como mínimo, debe haber uno por trimestre.
EN EL CONGRESO
Pablo Iglesias tomó la decisión de destituir a Pascual este mismo martes y se la comunicó personalmente, en una conversación en elCongreso de los Diputados, según ha explicado la jefa de gabinete del jefe podemista. Montero ha ratificado lo que Podemos anunció el martes a medianoche en un comunicado: se le destituye por "pérdida de confianza derivada de una gestión deficiente, incapaz de afrontar los problemas". "Es el responsable", ha señalado.
El entorno de Iglesias no va más allá. Vinculan la destitución a la incapacidad de Pascual por controlar los territorios, y ponen como ejemplo las diez dimisiones que se produjeron la semana pasada en la dirección regional de Madrid. Los dirigentes que decidieron retirarse son próximos a Errejón y se marcharon por un enfrentamiento directo con el secretario general en esta autonomía, Luis Alegre, fiel a Iglesias.
Este miércoles por la tarde se reúne en la sede del partido en Madrid la dirección regional para analizar el escenario tras la dimisión de un bloque de sus consejeros.
