La presidenta del Congreso, Ana Pastor, ha utilizado este jueves, durante su discurso en el acto de la Constitución, citas un tanto heterodoxas tratándose de una dirigente del PP. Pastor ha incluido las palabras de exdirigentes como Santiago Carrillo y Josep Tarradellas, durante una intervención pensado al milímetro para trasladar la importancia de "no poner en riesgo la convivencia".

La Constitución, que cumple 40 años, no es "un candado" y se "puede reformar", ha señalado, pero lo más importante es "renovar el gran pacto constitucional", en un momento en el que se ve amenazado por la crisis territorial, que Pastor no ha llegado a citar directamente. "Ningún camino, ningún atajo, merece la pena si pone en riesgo la convivencia", ha argumentado.

"En todos estos años, la Constitución ha sido el marco en el que se ha desarrollado nuestra convivencia, con su aplicación cotidiana por todas las instituciones y su interpretación por el Tribunal Constitucional. Nunca ha sido un candado. Como toda obra humana, es perfectible y admite reformas. Ya ha tenido algunas", ha dicho la presidenta de la Cámara baja.

"Debemos tomar como ejemplo la prudencia y sabiduría de los constituyentes. Ninguna Constitución debería reformarse con menos acuerdo del que la creó", ha continuado Pastor.

El consenso al que ha apelado parece difícil de conseguir en la actualidad, dadas las enormes diferencias que separan al PP (contrario a la reforma constitucional), Ciudadanos, el PSOE y Unidos Podemos.

El discurso de la presidenta del Congreso ha recibido aplausos en dos ocasiones. La primera, cuando ha traslado su "respeto y gratitud" al Rey Juan Carlos. La segunda, al final de la intervención. Los diputados de Unidos Podemos, con Pablo Iglesias a la cabeza, no han aplaudido en ninguna de ellas.