El exsecretario general del PSOE Pedro Sánchez se sentará a partir de martes en un escaño en la quinta fila del hemiciclo del Congreso-la cuarta de su grupo-, y el actual portavoz socialista, Antonio Hernando, ocupará su lugar. El grupo socialista ha comunicado hoy a la Mesa de la Cámara baja los cambios en el reparto de escaños entre sus 84 diputados a raíz de la crisis abierta en el partido y que acabó este fin de semana con la salida de Sánchez y la creación de una gestora.

Según el escrito presentado, Sánchez ocupará precisamente el escaño que ostentaba hasta ahora el que fue su rival en las primarias del PSOE, Eduardo Madina, que se situará ahora un escalón más abajo.

El presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández, ha asegurado antes de la reunión del grupo socialista que no le ha correspondido a él decidir en qué sitio se tiene que sentar Sánchez, y ha defendido que sea en "un lugar digno".

SIN OTROS CAMBIOS EN LA FILA DE HONOR

Junto a Hernando, en la fila de honor el PSOE no habrá más cambios significativos, ya que al lado del portavoz se sentará el secretario general del grupo y socialista andaluz, Miguel Ángel Heredia, y a continuación las secretarias generales adjuntas Isabel Rodríguez yMeritxell Batet.

No obstante, sí se observa una mejora de posiciones entre los miembros de la actual gestora en detrimento de los diputados más afines a Sánchez.

Es el caso de Antonio Pradas, destacado socialista andaluz y que fue el encargado de presentar las cartas de dimisión de 17 de los miembros de la Ejecutiva del PSOE, quien mejora su posición en el hemiciclo y se sitúa en la segunda fila del partido.

EL NUEVO LUGAR DE LUENA

Por contra, los más leales al dimitido son relegados a posiciones más discretas. Destaca su secretario de organización, César Luena, que pasa de la segunda fila del PSOE, justo detrás de Sánchez, a la quinta.

También Pilar Lucio, Adriana Lastra, María González Veracruz o Susana Sumelzo son trasladadas a los escaños más alejados de la tribuna.