El presidente Pedro Sánchez compareció ayer en el Foro Económico Mundial (WEF, por su sigla en inglés) de Davos (Suiza) para transmitir que el nuevo Ejecutivo de coalición con Unidas Podemos «no será un Gobierno que se quede de brazos cruzados, ni un mero observador, sino que va a actuar» para llevar a cabo su programa. Un programa del que destacó una ambiciosa agenda de desarrollo tecnológico y de transición ecológica.

Ante un par de centenares de personas, presentó la agenda económica y política del nuevo Ejecutivo y sus planes para reducir en un 20% la emisión de gases de efecto invernadero en el horizonte del 2030 y alcanzar la neutralidad en el 2050. Para ello, se prevé una inversión pública y privada de hasta 236.000 millones en una década y la creación de hasta 364.000 nuevos empleos relacionados con la transición energética.

Las vicepresidentas de Economía, Nadia Calviño, y de Transición Ecológica, Teresa Ribera, que acompañan al presidente en su viaje a Davos, estaban presentes en el auditorio junto con una decena de representantes de multinacionales españolas que también asisten al Foro Económico. Entre ellos, Ana Botín (Santander), Carlos Torres (BBVA), José Manuel Entrecanales (Acciona), Ignacio Sánchez Galán (Iberdrola) o Iosu Jon Imaz (Repsol), José Vicente de los Mozos (Renault), Francisco Reynés (Naturgy) o Rafael del Pino (Ferrovial).

«Somos el primer país del mundo en haber diseñado una estrategia de transición justa», afirmó el presidente un día después de que el segundo Consejo de Ministros ordinario del nuevo Ejecutivo aprobara la declaración de «emergencia climática» y un plan de acción.

DÉFICIT Y RIGOR FISCAL / Sánchez reiteró su compromiso con «el rigor fiscal» y la reducción del déficit y de la deuda pública. Esto, dijo, «generará sin duda mayor confianza entre los agentes económicos y permitirá al Gobierno más posibilidades de acción e inversiones». También se refirió al objetivo de «justicia fiscal» que busca el Ejecutivo, pero no detalló sus planes para una mayor contribución de las rentas más altas ni sobre la puesta en marcha de una nueva tasa digital.

La vicepresidenta señaló que, en las reuniones de los miembros del Gobierno en Davos con representantes de firmas, bancos y fondos de inversión no se percibió «preocupación» por la coalición del PSOE con Unidas Podemos. «En todo caso, lo que hay es curiosidad», añadió.

Sánchez se reunió, entre otros, con el presidente de la alianza global Renault-Nissan-Mitsubishi, Jean-Dominique Senard, al margen del Foro Económico Mundial de Davos (Suiza). Según fuentes de la Moncloa, Senard se comprometió a que no habrá despidos de trabajadores en ninguna de las tres plantas que tiene Nissan en territorio español, en Barcelona (Zona Franca), Cantabria y Ávila. Del Gobierno acudió a la reunión Calviño y el jefe de la Oficina Económica de Moncloa, Manuel de La Rocha.